Mucho tendrá que cambiar el Alavés respecto al insulso equipo que se vio en El Sadar si quiere, al menos, plantarle cara a un sólido líder que solo ha perdido un partido y que tiene en Luis Suárez a todo un auténtico baluarte ofensivo, con ocho dianas en once encuentros y una efectividad del 50% en los remates que realiza sobre la puerta contraria.

A favor de los babazorros, el hecho de que la escuadra que dirige Pablo Machín siempre ha rendido bien durante la presente temporada cuando se ha medido a uno de los grandes. Empató ante la Real y Barcelona, mientras que fue capaz de mojarle la oreja al Real Madrid en Valdebebas.

Frente a esta dinámica positiva contra los rivales más potentes asoma el dato de que el Alavés no le gana al Atlético desde mayo de 2003, con una decena de enfrentamientos posteriores en los que, como mucho, ha logrado arrancar cuatro empates.

Machín recupera para la contienda a Rodrigo Battaglia, una vez cumplido el partido de sanción por parte del futbolista argentino, que ocupará la plaza que deja vacante Tomás Pina, castigado al ver su quinta amarilla en el estadio iruindarra.

No parece que vaya a ser el único cambio en el once albiazul, pues Jota Peleteiro podría ser el recambio de un Édgar Méndez que no ha estado a su nivel en los últimos envites, y es posible que el preparador soriano recupere su dupla de delanteros, buscando un fútbol directo que evite peligrosas pérdidas en medio campo.

También se prevén novedades en el adversario rojiblanco, la más notable que Joao Felix inicie el duelo desde el banquillo, con el objetivo de darle descanso, siendo reemplazado por Correa. Además, los colchoneros están obligados a realizar una permuta en el eje de la zaga por la sanción de Savic, entrando Giménez.

Focos para derretir la nieve

Pese a las previsiones meteorológicas, no parece que vaya a haber contratiempos para que el partido se dispute, después de que Mendizorrotza haya amanecido con 15 centímetros de nieve en su césped. Ante tal circunstancia, el club ha puesto en marcha todo un equipo de limpieza compuesto por quince operarios para que el verde del feudo gasteiztarra esté en perfectas condiciones a primera hora de la tarde de mañana.

Incluso se ha aplicado el calor de varios focos, con la finalidad de derretir el hielo acumulado y facilitar la retirada de la nieve sin perjuicio para el buen estado del terreno de juego y que el envite se celebre con total normalidad.

Es lo que espera un Machín que ha avisado de que «si el Atlético se adelanta en el marcador, será complicado revertir la situación» y de que los suyos tienen «muy en cuenta que es el líder y que tiene unos números dífíciles de mejorar».

«Reciben muy pocos goles y pocas ocasiones, y están en un buen momento, pero sabemos que podemos ganar a cualquiera, si estamos bien», ha apuntado el míster babazorro, para quien «es un reto enfrentarse al líder». «Que la dificultad sea muy alta no indica que sea imposible», ha insistido, consciente de que su equipo debe rendir «al máximo nivel» si quiere competir de tú a tú.

Para ello, el Alavés tratará de ser un bloque «que cometa pocos errores» y así poner en dificultades a un líder que ahora mismo es el máximo candidato a llevarse el entorchado liguero, si bien «la competición es muy larga y Real Madrid, Barcelona u otro tapado pueden estar al final apretando», ha señalado Machín.