La Real no ha conseguido su objetivo. Como explicaba ayer Natalia Arroyo, su equipo quería no sólo competir, como ha hecho prácticamente en todos sus partidos, sino también imponerse a uno de sus rivales directos, cosa que de momento sólo han conseguido con el Levante. Pero el Madrid, que ya se impuso a las donostiarras en la primera vuelta y que llegaba a Zubieta en plena racha –cinco victorias consecutivas–, ha amarrado un empate que le permite mantener las distancias: cuatro puntos siguen separando a ambos equipos en la clasificación.
Como es habitual, la Real ha llevado la iniciativa. Y se ha acercado con peligro a la portería de Paula, sobre todo por medio de Eizagirre. Pero el primer aviso serio lo han dado las visitantes, con un testarazo de la recién llegada Lucía León al larguero, y el primer gol también: en el 28, Sara Tui cabeceaba un córner para marcar el 0-1. Ha apretado la Real sin demasiado éxito hasta que, en la última acción previa al descanso, un remate cruzado de Kiana Palacios devolvía las tablas al marcador.
Tras el descanso las locales han redoblado esfuerzos. Y poco ha faltado para que culminasen la remontada, sobre todo con una acción de Nahikari que incluso ha superado a Paula pero se ha quedado sin hueco para rematar y, casi de inmediato, con un centro de Eizagirre que Joyce ha estado a punto de introducir en su portería.
Las cosas se han torcido a veinte minutos final, cuando Mendoza veía la segunda amarilla. El equipo blanquiazul lo ha seguido intentando pero en inferioridad apenas ha lastimado a un Madrid muy seguro en la defensa de su punto.