El Gobierno de Nafarroa y el Ayuntamiento de Milagro acordaron el cierre perimetral y el interior de la hostelería a partir de mañana. En el municipio, de algo más de 3.400 habitantes, la incidencia acumulada de los últimos 14 días es de 1.873 casos por 100.000 habitantes, mientras que en los últimos 7 días la cifra se sitúa en 1.610 casos. El martes se llevó a cabo un cribado a la población de entre 44 y 64 años para profundizar en la contención del virus, del que, provisionalmente, se conocen 21 casos positivos.

En la localidad se encuentra la residencia El Pinar para personas mayores, que tras mantenerse libre de covid-19 en los primeros meses de la pandemia, se vio afectada en setiembre y octubre. Juana Etxeberria, directora de la residencia, ha explicado a NAIZ que entonces detectaron una veintena de positivos y fallecieron siete personas.

Sin embargo, ante este nuevo brote que está afectando al pueblo navarro, la directora no percibe nerviosismo: «La verdad que los residentes ahora están tranquilos. Están vacunados, no hay sensación de agobio. Tampoco hemos percibido por parte de las familias. Pienso que en general están tranquilas», cuenta Etxeberria.

Los residentes (todos menos uno) fueron vacunados a lo largo del mes de enero. Y los trabajadores también han recibido ya las dos dosis. A pesar de ello, han extremado las precauciones. «Se han limitado las salidas al pueblo de Milagro y las visitas se realizan en exterior, en el jardín. No se han cortado ni las visitas ni las salidas, pero sí se han limitado. No hay salidas al pueblo y no hay visitas en el interior».