La plataforma Memoria Gara ha pedido al Parlamento de Gasteiz que la gestión el futuro Centro Memorial de las Víctimas del 3 de marzo de 1976 se realice de forma «social y colectiva» porque considera que «es lo que dotará de legitimidad» al proyecto que se ubicará en la Iglesia San Francisco de Asís de Zaramaga.
El Gobierno de Lakua, la Diputación Foral de Araba, el Ayuntamiento de Gasteiz y la Diócesis de la capital alavesa hicieron público el pasado mes de febrero un acuerdo para realizar este proyecto. El lunes, el Instituto Vasco de la Memoria-Gogora presentó en Bilbo su Plan de Actuación para esta legislatura que recoge la creación del memorial con el nombre ‘Martxoak 3 Memoriagunea' en colaboración con las instituciones.
Este miércoles, la Comisión de Derechos Humanos, Igualdad y Justicia del Parlamento de Gasteiz ha acogido la comparecencia de los portavoces de la plataforma Julen Diaz de Argote y Josu Santamarina quienes han dado su opinión.
Han presentado a los grupos parlamentarios el proyecto ‘M3 San francisco espacio para la memoria. Bases para la construcción de un espacio para la memoria en la Iglesia de San Francisco de Asis en Zaramaga’, que recoge las conclusiones de las Jornadas 'Martxoak 3: Memoria(s), Espacio(s), Colectivo(s)' que se desarrollaron en Gasteiz en febrero del año 2020 sobre este proyecto de memoria.
La plataforma ha apostado por gestionar este espacio de forma «social y colectiva». «Creemos que Martxoak 3 Elkartea, que es quien lleva décadas en los diferentes ámbitos -judicial, social, simbólico- trabajando por el reconocimiento, denunciando la impunidad, tiene que estar presentes», ha defendido. No obstante, ha subrayado que en este proceso es necesario contar con las instituciones públicas, «tanto por los recursos como por dar legitimidad y reconocimiento» al proyecto.
«Espacio vivo»
Según ha explicado, Memoria Gara se ha creado «con la vocación de intentar aunar diferentes visiones para trabajar esta memoria» y han señalado que si se hace este «espacio de memoria obrera», esto «implica hablar no solo de las luchas obreras del pasado sino también de las del presente».
«Hemos intentado buscar el apoyo total de todas las fuerzas sindicales. Creemos que son los órganos que representan a la clase trabajadora actualmente, aunque el 3 de marzo no fue un movimiento tan sindical sino que fue una experiencia asamblearia, muy única, y por ello tan valiosa a nivel histórico», ha señalado.
Memoria Gara ha afirmado que contar con el apoyo de las instituciones para crear este recurso «valioso e importante», no tiene por qué significar «desempoderar a los colectivos que han estado en la brecha durante décadas».
También solicita que no sea un «museo al uso», sino que apuesta por que sea un «espacio vivo», con exposiciones temporales y aprovechando la «significación» que tuvo el lugar, para que sea una reivindicación «no solo de derechos humanos, sino también de derechos sociales, económicos y culturales».