El pasado 7 de mayo se alertó de un nuevo socavón en las obras del Metro de Donostia. Días después EH Bildu afirmó que el agujero era tres veces más grande que los registrados en otras ocasiones, una estimación que se ha quedado corta, ya que ETS ha confirmado este lunes que se trata de un socavón de 138 metros cúbicos de volumen. Cuatro veces más grande que los anteriores, que eran entre 20 y 30 metros cúbicos.

«A pesar de la mayor gravedad, o precisamente por ello, la información ofrecida a la ciudadanía desde las diferentes Administraciones Públicas ha sido muy escasa, y lo poco que han comunicado ha estado repleto de medias verdades y mentiras», ha apuntado el grupo soberanista, que ha preguntado sobre lo ocurrido en la comisión de seguimiento de las obras, a la que no ha asistido el alcalde, Eneko Goia.

La representante de EH Bildu en la citada comisión, la edil Garbiñe Alkiza, ha censurado la gestión de la obra y ha cargado contra el Ejecutivo local: «Primero escondieron la existencia del socavón y luego, cuando EH Bildu lo destapó, han intentado restarle importancia para ocultar que a día de hoy no existen las garantías de seguridad suficientes para seguir con las perforaciones, y porque son conscientes de que están haciendo una chapuza de obra».

EH Bildu ha vuelto a exigir que, por la seguridad de la ciudadanía y de los trabajadores, se paralicen las obras hasta que se realice un «análisis exhaustivo» del subsuelo de la zona. «Si los estudios realizados hasta ahora no han sido capaces de detectar un socavón de semejantes proporciones, ¿cómo tenéis la osadía de asegurar que las obras se van a retomar en junio como si no pasara nada?», ha preguntado Alkiza.