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Vilnius

Lituania construirá un muro para frenar la inmigración procedente de Bielorrusia

El conflicto político que vive Bielorrusia se ha extendido a los países vecinos. El Gobierno de Lukashenko ha elegido a Lituania como puerta de salida hacia la UE de la migración procedente de Oriente Medio y África. Vilnius cree que la solución pasa por levantar un «muro físico» de 500 kilómetros.

El presidente del Consejo de la UE, Charles Michel, junto a la primera ministra de Lituania, Ingrida Simonyte, visitó el 6 de julio la frontera con Bielorrusia en Padvarionys. (Petras MALUKAS | AFP)
El presidente del Consejo de la UE, Charles Michel, junto a la primera ministra de Lituania, Ingrida Simonyte, visitó el 6 de julio la frontera con Bielorrusia en Padvarionys. (Petras MALUKAS | AFP)

El Gobierno lituano ha anunciado este viernes que construirá un muro en la frontera con Bielorrusia ante el fuerte incremento del número de migrantes que están llegando desde Bielorrusia a este Estado miembro de la UE.

De hecho, las Fuerzas Armadas ya han comenzado a instalar vallas con alambre de púas a lo largo de la frontera, una medida rápida destinada a disuadir a las personas migrantes, la mayoría procedentes de Medio Oriente y África, de pasar a territorio lituano.

«La primera fase es una cerca de alambre de púas. En la segunda construiremos un cierre físico», de unos 550 kilómetros de largo, ha precisado la ministra de Interior, Agne Bilotaite.

Tensión política en aumento

La tensión entre Vilnius y Minsk se ha disparado durante el último año después de que Lituania se haya convertido en una puerta giratoria para la oposición bielorrusa, que acusa al presidente Alexander Lukashenko de haber cometido fraude en las últimas elecciones presidenciales.

Así, la líder de la oposición bielorrusa, Svetlana Tikhanovskaïa, se refugió en este país báltico tras reclamar la victoria en los comicios del pasado 9 de agosto.

A finales de junio, el Gobierno de Lukashenko dio un nuevo giro al conflicto anunciando la suspensión de la participación de Bielorrusia en la Asociación Oriental de la UE, en represalia a las sanciones que Bruselas aplica después de que se obligara a un avión a aterrizar en Minsk para detener a un opositor.

Entonces, el ministro de Exteriores bielorruso ya anunció que la suspensión de ese acuerdo tendría «un impacto negativo» en la lucha contra la «inmigración clandestina» y el «crimen organizado».

Al menos 1.500 personas en lo que va de año

Este viernes, la Policía de fronteras lituana ha anunciado el arresto de otros 37 migrantes en las últimas 24 horas, lo que eleva el número total de cruces ilegales detectados a más de 1.500 en lo que va de año.

En todo 2020 solo hubo 80, una cifra muy reducida en comparación a la de este año aunque se tenga en cuenta que la movilidad se vio muy limitada en todo el planeta a causa de la pandemia de covid.

Este aumento del número de migrantes pone a Lituania, un país de 2,8 millones de habitantes, en dificultades para acoger a los recién llegados, ya que Vilnius no ha devuelto hasta ahora a ninguno de ellos a pesar de rechazar todas sus solicitudes de asilo. En junio, el Ejército lituano instaló tiendas de campaña para albergarlos.