Otro recién ascendido, esta vez el Espanyol, evaluará si Osasuna ha trabajado lo suficientemente bien en pretemporada como para iniciar la competición oficial con garantías. La escuadra rojilla se hizo con la Euskal Herria Txapela por primera vez en su historia y perdió frente al Liverpool en el homenaje a Michael Robinson como resultados más significativos de esta fase de preparación.
Ahora llega la hora de la verdad para plasmar lo ensayado y el cuadro periquito va a ser una inmejorable piedra de toque, un rival que intentará no repetir los mismos errores que cometió hace dos años para descender a la categoría de plata y que parte con el aliciente de regresar al máximo nivel.
Un adversario peligroso, el último al que se midieron los rojillos con público, por parecer a priori más débil al provenir de Segunda, pero que, por tradición y presupuesto, es claramente un oponente de Primera. La escuadra navarra deberá mentailizarse rápido de esa circunstancia si quiere doblegar a los catalanes.
Y solo lo hará si los de Jagoba Arrasate exhiben sus señas de identidad que les han llevado a encadenar su tercer ejercicio consecutivo en Primera. Presión sobre el contrincante, desarrollo del juego en campo contrario y apertura a bandas buscando centros y remates.
Con esa premisa y a sabiendas de que esto no ha hecho más que comenzar, intentar aventurar un once resulta tarea harto complicada, con algunas posiciones abiertas a la especulación, como es el caso de uno de los centrales, ante la ausencia de Aridane y la entrada en la lista de Unai Dufur, por el que podría apostar de inicio el técnico vizcaino, a la vista de los buenos partidos que ha ofrecido en pretemporada.
Otro puesto en el aire es el del lateral izquierdo, lesionado Cote y con Juan Cruz en tela de juicio, hasta el punto de que incluso ya se ha especulado con la posibilidad de que se intente el regreso de Manu Sánchez. Además, Arrasate ha probado a Rubén García en dicha ubicación –no le es ajena–, con lo que no sería descabellado que el futbolista valenciano multiusos partiese desde ahí.
En cuanto a la medular, el regreso de Jon Moncayola tras la plata de Tokio le otorga opciones de titularidad, pues el de Garinoain no se desgastó especialmente en la cita olímpica y se encuentra en forma por la disputa de dicho torneo.
Por último, en la delantera parece seguro el concurso de Kike García, por aportar trabajo y acierto, aunque a Budimir tampoco le ha faltado esto último durante las últimas semanas. Está por ver si Chimy Ávila saldrá en el once y cómo le recibirá el respetable.
Arrasate: «Tres delanteros, tres hijos»
En su cuarta temporada consecutiva en el banquillo osasunista, lo que le acerca a mitos recientes como Pepe Alzate y Javier Aguirre, Jagoba Arrasate es consciente de que su objetivo es «tocar la tecla adecuada para que el rendimiento de los jugadores sea el máximo».
Así, ha reconocido que ahora mismo en la plantilla hay diferentes niveles de forma, como consecuencia de los casos de coronavirus que algunos de sus futbolistas han tenido que sobrellevar durante este verano. «Se trata de ser competitivos, necesitamos mantener un ritmo alto de juego y hacerlo en campo contrario», ha defendido.
El preparador de Berriatua se ha mostrado «contento» por la plantilla que se ha confeccionado. «Aunque no soy mucho de pedir, se me ha dado lo que solicité, si bien puede que estos últimos quince días de mercado sean más movidos y estaremos atentos a ello», ha señalado.
En cuanto al reto que deberá afrontar para hacer compatible el concurso de Budimir, Kike García y Chimy Ávila, Arrasate lo ha comparado a lo que tiene que hacer a diario con sus tres hijos. «Unas veces estoy más con uno que con el resto y otras veces es al revés, pero los quiero a todos por igual», ha comentado entre las risas de los periodistas que, más de un año después, han podido vivir de manera presencial una comparecencia con el míster rojillo.
También se le ha interpelado por el posible debut oficial de Dufur en el eje de la zaga, pero ha optado por echar balones fuera, asegurando que también están las opciones de Unai García y Ramalho. «Confío en todos los centrales de que dispongo», ha zanjado.
Preguntado por una cuestión extradeportiva, como es el voto favorable de Osasuna al acuerdo de LaLiga con el fondo de inversión CVC, ha subrayado que «entiendo que ello genere controversia, pero carezco de la información necesaria sobre ello y, además, a mí de lo que me toca encargarme es de que el equipo tenga un buen rendimiento en el apartado deportivo».
La Federación de Peñas, en contra
Quien sí ha opinado y de manera muy crítica sobre dicho asunto ha sido la Federación de Peñas de Osasuna, quien ha manifestado su «indignación» y «preocupación» por que la actual junta directiva haya emitido su voto favorable «en un asunto tan sensible para el futuro del club, sin someter antes a exposición, debate y votación de la Asamblea de Compromisarios».
«Hemos de recordar a la junta directiva que no somos una SAD y que el resto de clubes (Athletic, Barcelona y Real Madrid) han manifestado su imposibilidad para aprobarlo sin consultarlo a los socios, siendo Osasuna el único que ha votado a favor», censura dicha Federación.
Señala, asimismo, que «nos preocupa que el deseo de maquillar las cuentas hoy nos estrangule como club los próximos 50 años. Se está diciendo equivocadamente que es un préstamo sin intereses a devolver en 40 años, cuando en realidad se ceden el 10% de los derechos audiovisuales durante los próximos 50 años».
Este organismo evalúa que, «con los ingresos actuales por televisión, esto supondría ceder más de 200 millones, a razón de cuatro millones por año. Por tanto, la hipoteca para futuros gestores del club y el futuro de Osasuna suponen un aumento del endeudamiento de más de 250 millones para los próximos cincuenta años», de ahí que solicite a la dirección del club rojillo «la retirada de dicho acuerdo».