Cientos de personas se han concentrado en la calle Chinchilla de Iruñea, frente a la entrada principal de la Ciudadela, donde a partir de este jueves y hasta el día 12 se celebrará el Gran Premio Hípica Murallas de Pamplona. Al finalizar la concentración, tras una pancarta en la que se leía ‘Hipikarik ez. No a este modelo de ciudad’, los congregados han rodeado la Ciudadela iruindarra.

Los convocantes de la protesta, la plataforma Hipikarik Ez, han señalado que «este espectáculo responde a un modelo de ciudad basado en la imposición» y que «poco tiene que ver» con el modelo de ciudad y cultural que, por contra, se impulsa desde el movimiento popular. «No podemos obviar que, históricamente, la hípica ha sido el deporte de la aristocracia y de las élites ecónomicas», han recordado.

Además, han rechazado la «preocupante gestión del dinero público», algo que, a su juicio, «responde a intereses políticos y económicos concretos». «En principio se van a gastar 35.000 euros, pero el presupuesto es de 200.000. No sabemos exactamente cómo se va a financiar este acto, ni a qué intereses privados responde». Hoy mismo, la codirectora del evento, Marta Erroz, ha asegurado que la organización no tiene «nada que ver con política» en referencia a la vinculación de la exconcejala de UPN Amaya Otamendi con el acto. «Hay varios temas que no han sido aclarados», han añadido desde la plataforma.

Gritos como «menos hípica, más sanidad» o «UPN kanpora», han acompañado la protesta, en la que también se han visto carteles «agradeciendo» al alcalde Enrique Maya la «playa» que ahora tiene Iruñea o contra la explotación animal.

De hecho, los congregados han rechazado la utilización de animales para este tipo de eventos y el impacto que ha tenido sobre la Ciudadela. «La arena, aparte de destruir el jardín, también ha afectado a los sapos y otros animales que allí habitan. ¿Cómo se va a reparar el daño causado?», han preguntado.

Una ciudad para todos

Frente a ello, Hipikarik Ez ha apostado por «una Iruñea habitable para todo el mundo, que no esté al servicio de las élites». Por ello, han remarcado la necesidad de actividades «basadas en la participación y que no creen más desigualdad».

En ese sentido, han querido mandar su apoyo al Gaztetxe de Arrotxapea, que tiene este jueves fecha de desalojo. «Hemos visto cómo en los últimos meses el Ayuntamiento de Iruñea ha intentado paralizar los proyectos populares, vecinales y comunitarios que se vienen construyendo desde los barrios. Para quienes queremos otra Iruñea, estos proyectos son imprescindibles».

Este fin de semana, se inutilizó una de las máquinas que se estaban empleando para acondicionar el terreno en el que se disputará el gran premio, lo que obligó a la organización a contratar una nueva.