El campamento de migrantes de la isla griega de Samos ha tenido que ser evacuado a causa de un fuerte incendio registrado el domingo por la tarde, si bien nadie ha resultado herido.
Las autoridades del país han indicado que el origen del incendio se sitúa en una serie de viviendas abandonadas dentro del campamento y han estimado que 550 migrantes han sido evacuados.
Al menos una decena de menores no acompañados han tenido que ser trasladados a una nueva instalación en la isla, según informaciones de la cadena de televisión Star. El Gobierno griego ha comenzado transferir a todos los migrantes del campamento de Samos a un nuevo campamento a partir de este lunes.
El campamento en cuestión ha llegado a albergar a más de 7.500 migrantes. El nuevo campamento, que tiene capacidad para 3.000 personas, ha sido financiado por la UE. Sin embargo, el nuevo campamento ha sido objeto de numerosas críticas por parte de varias ONG, que señalan que las condiciones son «muy restricitivas». Y es que contará con cámaras de videovigilancia, escáneres de rayos X y puertas magnéticas.