Bajo el lema ‘!Ninguna vecina fuera del barrio! !Pilar y Ramón se quedan!’, decenas de de personas se concentraron en la Plaza de la Encarnación de Atxuri este martes para denunciar que el Banco Santander pretende desahuciar a una familia en situación de grave vulnerabilidad económica el próximo 13 de octubre.

«Desde la crisis de 2008 hasta la actualidad, el banco ha sido “rescatado” con de dinero público y obteniendo grandes beneficios económicos durante los últimos años. El Santander pretende desahuciar a la familia sin haberles ofrecido ninguna alternativa habitacional y sin haber dado ninguna oportunidad de negociación para poder llegar a algún acuerdo a la familia», señaló el sindicato.

De hecho, Representantes del sindicato se reunieron en setiembre con el director de la oficina del Banco Santander del Casco Viejo bilbaino para intentar solucionar y le propusieron una mesa de negociación entre los actuales inquilinos, Maizterrak y el propio Banco Santander. Pero al parecer, el banco no accedió.

«¡No son desahucios, es una guerra contra las pobres! Una guerra que atraviesa nuestras vidas y golpea nuestros cuerpos intentando sepultarnos en vida. Guerra que ataca nuestra existencia, que intenta anularnos como personas y con la cual intentan arrebatar nuestros sueños, ilusiones y alegrías», apuntó el Sindicato de Inquilinas de Bilbo.

Ante el desahucio previsto para el13 de octubre, los miembros del sindicato aseguraron que sus cuerpos «se convertirán en un muro de solidaridad, amor y apoyo mutuo a la familia de Pilar». «Nuestros cuerpos harán posible lo imposible, harán posible defender la casa mientras los Aburto aplauden la intervención policial, hará posible recuperar la sonrisa de la familia y anular la presión a la que estos días están sometidas. Solo a través de la solidaridad de clase, el apoyo mutuo y colectivo haremos posible lo imposible!» añadieron.

Por ello, han hecho un llamamiento a los ciudadanos a acudir el 13 de octubre a la calle Ollerías Bajas para paralizar el desahucio.