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Identifican los restos de Francisco Lecea, fugado de Ezkaba y fusilado en Olabe

Los restos del mendabiarra Francisco Lecea, fugado de Ezkaba y fusilado en Olabe en 1938, han sido identificados en las fosa común de Olabe gracias al Banco de ADN del Gobierno de Nafarroa.

Imagen de los restos hallados en la fosa de Olabe. (Gobierno de Nafarroa)
Imagen de los restos hallados en la fosa de Olabe. (Gobierno de Nafarroa)

El Banco de ADN del Gobierno de Nafarroa ha conseguido identificar de entre los restos hallados en la fosa de Olabe los de Francisco Lecea, natural de Mendabia, que participó en la Fuga de Ezkaba en 1938 y fue fusilado con otros quince presos todavía sin determinar.

Con Lecea son ya 31 las personas identificadas por el Banco de ADN del Gobierno Foral, gestionado a través del Instituto Navarro de la Memoria, que ha abierto hasta la fecha 285 expedientes.

En torno a la fuga, son ya nueve los fugados identificados, y se han tomado muestras genéticas de familiares de otros cuarenta más, ha recordado el Ejecutivo foral en una nota.

Fosa de Olabe

Los restos de Francisco Lecea se han identificado en la fosa de Olabe, que fue la primera que se exhumó dentro del plan de exhumaciones del Gobierno navarro, en febrero de 2016. Allí se encontraron enterrados dieciséis cuerpos, sin que, hasta la fecha, se hubieran podido determinar la identidad de ninguno.

Es la fosa con más cuerpos de las once exhumadas en relación con la fuga de Ezkaba. Fue reconocida en 2019 como Lugar de Memoria Histórica de Nafarroa, y señalizada como tal.

Además, es el destino final de la primera etapa del GR225, y ha sido escenario de actos memoriales, como los realizados en el contexto de la marcha ‘Las botellas de la libertad’, en el marco del programa Escuelas con Memoria.

Francisco Lecea

Francisco Lecea estaba casado con Fermina Cenzano y tenía dos hijos. Trabajaba como ferroviario en Logroño, donde fue detenido por un grupo de falangistas, que lo trasladaron a Iruñea.

Ingresó en el Fuerte de Ezkaba, el 21 de enero de 1937. Participó en la fuga del 22 de mayo de 1938, y fue capturado y fusilado en Olabe, con otros quince compañeros, todavía sin identificar.

Además, la familia de Francisco sufrió la represión y su viuda tuvo que marcharse del pueblo e ir a vivir a Burgos con sus dos hijos.

Francisco Lecea tuvo dos hermanos muertos tras el golpe militar de 1936. El mayor, Manuel, nacido en Mendabia en 1895, era labrador, estaba casado y tenía seis hijos, y estaba ligado a la UGT. Fue fusilado en Sansol el 29 de julio de 1936, a donde fue conducido desde la cárcel local de Mendabia.

Lorenzo nació en 1912, era soltero, jornalero, y adscrito a la CNT. Fue detenido y conducido a la prisión de Iruñea, donde permaneció del 29 de julio al 3 de agosto de 1936. Fue fusilado en Urbiola el 7 de setiembre de 1936, tras pasar por la cárcel de Lizarra.

Un cuarto hermano, Toribio, se vio obligado a alistarse en el Tercio Sanjurjo, aunque consiguió sobrevivir.