Con un sistema al estilo Biharko Izarrak de mano,  en el que las parejas han ido cambiando durante todo el campeonato para que los dos mejores delanteros y los dos mejores zagueros se midan en la final, la emoción ha sido el principal argumento de un Urrezko pala-pro que el sábado repartirá sus txapelas en Mungia. Tras una última jornada en la que las calculadoras echaron humo, Dan Necol e Ibai Pérez, los dos mejores en su demarcación, se medirán a Esteban Gaubeka e Iker Gordon, clasificados en segundo puesto en sus posiciones.

Para ello, la pareja vizcaina tuvo que sufrir en el último partido de la liguilla, en el que el Gallo se vio obligado a hacer un joko para sacar de la final a Pablo Fusto, que fue el delantero de un Iker Gordon que solo ha podido ceder un set en sus dos últimos partidos para jugar su primera final en Mungia. Con las tuercas tan prietas, los dos delanteros han ganado cuatro partidos antes de la final y los zagueros otros tres, el pronóstico de la final es muy incierto, si bien Iker Gordon ha querido dejar el favoritismo para el actual campeón individual, Ibai Pérez.

Con las ideas claras

Esta mañana han apartado el material de cara al sábado, una cita con el cestaño que no ha dejado del todo satisfechos a Gaubeka-Gordon, ya que, según ha explicado el zaguero, de las 20 pelotas 18 eran de las apergaminadas y solo 2 de las blancas que ellos buscaban. Y es que, las cartas para la final del sábado están bastante claras y Necol e Ibai Pérez han buscado pelotas más difíciles de mover, confiando plenamente en la potencia del delantero francés, superior al resto en este sentido. La derecha de Iker Gordon también es poderosa y en este caso tratará de abrir huecos para que Gaubeka pueda jugársela adelante a la menor oportunidad.

Aquel que logre llevar el partido a su terreno tendrá bastante avanzado su camino hacia las txapelas.