La Real llevó a su máxima expresión el jueves ante el Sturm Graz los problemas que tiene para marcar goles en competición europea y en Anoeta esta temporada. En casa solo ha logrado siete goles en ocho partidos, cuatro a balón parado, dos de ellos de penalti, dos en lanzamientos que golpearon en un rival y sorprendieron a sus porteros y uno tras un gran error del central del Elche Roco que aprovechó Oyarzabal para marcar.

Los problemas de cara al gol de la Real en las dos últimas ediciones de la Europa League no se corresponden con la calidad de sus jugadores. Según las estadísticas oficiales, la pasada temporada solo fue capaz de marcar cinco goles, tres al flojo Rijeka, en ocho partidos, con 126 remates, de los que solo 34 fueron a puerta, 52 fuera y 40 los bloquearon las defensas rivales.

Esta campaña el equipo blanquiazul lleva en la Europa League 67 remates –19 a puerta, 25 fuera y 23 bloqueados–, para marcar cinco goles con una estadística mejorada por su mayor efectividad en Eindhoven, donde logró dos con siete disparos. En los otros tres encuentros ha promediado un tanto cada veinte remates.

La negación de cara a la portería alcanzó su máxima expresión ante el Sturm Graz porque las estadísticas oficiales de la UEFA recogen 30 remates, siete a puerta, diez fuera y trece bloqueados, para marcar un gol. Esa cifra superó el récord de estas dos temporadas de 28 ante el Rijeka, con dos goles que tampoco bastaron entonces para derrotar al equipo más débil del grupo. También lanzó 19 saques de esquina, en uno llegó el gol. por los 16 de la pasada temporada ante el AZ en Anoeta en un partido en el que marcó un gol con 25 remates.

Un problema

Cuando algo se repite deja de ser casualidad y evidencia un problema. A la Real le cuesta traducir su dominio y sus remates en goles. La Real es el tercer equipo de los 32 que juegan la fase de grupos de la Europa League que más ataques realiza. 189, solo superado por el Midtjylland danés (197) y el PSV (217).  

Es el quinto que más remata solo superado por Napoli (88), Bayer Leverkusen (73), Braga (72) y Lyon (70), pero lo hace sin acierto. Es el undécimo en remates entre los tres palos con 19, el segundo con más disparos bloqueados (23) por los 29 del Napoli y el decimoquinto en goles con solo cinco.

También es el tercero que más saques de esquina ha lanzado con 28, por los 31 del Midtjylland y los 39 del Napoli.

Unos datos que contrastan con los goles que recibe en función de los remates que concede. La Real ha encajado cuatro en 32 disparos de los rivales, nueve bloqueados, con ocho paradas de Remiro.

Un gol cada 7,6 remates condedidos

La pasada temporada la Real concedió 59 remates y encajó ocho goles. En las dos temporadas ha recibido en Europa League doce goles en 91 remates (uno por cada 7,6) y ha marcado diez de 193 (uno cada 19,3).

En este inicio los problemas de cara al gol, a pesar del liderato, no se reducen a la Europa League porque en la Liga la Real solo lleva en Anoeta cinco goles en sus seis primeros partidos, cuando la pasada temporada logró diez a pesar de recibir a Real Madrid, Valencia y Villarreal.

La Real acusó ante el Sturm Graz la ausencia de sus dos goleadores, Oyarzabal e Isak, que han marcado once goles entres los dos esta temporada. Portu, a pesar de que ha jugado quince partidos, diez como titular, y David Silva no se han estrenado, Sorloth marcó su segundo tanto el jueves y Januzaj y Barrenetxea solo suman uno cada uno.

No ganar en un partido en el que fue tan superior provocó que la Real dejara de ingresar los 420.000 euros que van de la victoria al empate y que se compliquen las opciones de aspirar a las dos primeras plazas que también implican un premio importante. La Real depende de si misma para ser primera y pasar a octavos, lo que da 1,1 millones, aunque tendrá que ganar los dos partidos en Monaco y al PSV en Anoeta. Aunque los holandeses derroten al Sturm Graz en casa y la Real pierda en el Principado, los blanquiazules serían segundos y jugarían los dieciseisavos si derrotan a los holandeses en el último partido de la fase de grupos.

Igualada la racha de la 2012-13

Lo importante es que, aun con esos problemas de cara al gol, la Real compite bien y encaja pocos tantos y por eso igualó el jueves la racha de quince partidos oficiales sin perder alcanzada en la última temporada en la que se clasificó para la Champions League (2012-13) con Philippe Montanier en el banquillo.

Se acerca a los dieciocho que se encadenaron en la penúltima (2002-03), cuando los entonces entrenados por Raynald Denoueix acabaron la primera vuelta invictos y solo perdieron en Zaragoza en la Copa tras el primer partido liguero. A partir de ahí jugaron un encuentro a la semana y sin apenas bajas, lo que da más mérito a la trayectoria actual.

Para igualar esa racha la Real deberá puntuar al menos en El Sadar el domingo a las 18:30 contra Osasuna. El equipo blanquiazul preparará el partido con una única sesión este sábado a las 12:00 en Zubieta a puerta cerrada y está casi descartada la presencia de Mikel Oyarzabal, que no ha sido convocado por la selección española, con lo que tendrá dos semanas para recuperarse antes del partido contra el Valencia.

Mikel Merino sí ha sido llamado por Luis Enrique, mientras que Luis de la Fuente ha convocado para la selección española sub'21 a Ayesa, González de Zarate, Turrientes, Karrikaburu y Lobete, lo que supone un gran problema para Xabi Alonso porque en Segunda no hay parón y tiene bajas importantes, sobre todo en defensa. Arambarri fue sustituido por un problema muscular en Málaga, Ezkurdia está de baja tras ser operado y, con la posible convocatoria también de Pokorny, se quedaría sin opciones para el puesto de central.