La Federación Española ha sancionado a Real Sociedad, Levante y Villarreal con la pérdida de tres puntos, además de una multa económica, por el «incumplimiento, consciente y reiterado, de órdenes, instrucciónes, acuerdos u obligaciones reglamentarias –uniformidad» . Es decir, por no portar habitualmente el logotipo de la RFEF, tal y como exige el ente federativo a los equipos de Primera Iberdrola.

Además, el Juez Único de Competición también sanciona a Rayo Vallecano, Betis y Valencia por el «incumplimiento de órdenes, instrucciones, acuerdos u obligaciones reglamentarias –uniformidad». Es decir, por el mismo motivo aunque, en este caso, al no considerarse el incumplimiento «consciente y reiterado», la sanción se limita a una multa económica.

La obligatoriedad de portar el logotipo de la RFEF ha supuesto uno de los innumerables desencuentros que mantienen la Federación Española y la ACFF desde la llegada de Luis Rubiales, y que ahora mismo tiene su principal caballo de batalla en el proceso de profesionalización de la Liga, que dejaría a la Española sin muchas de las facultades que tiene en la actualidad. Mientras tanto, sigue siendo la organizadora y máxima responsable de la competición. Y en el punto 8 de las Disposiciones Generales del reglamento de Primera y Segunda femeninas, el punto 5 estipula que «se deberá portar, con carácter obligatorio, en la manga derecha de la camiseta el parche  con el anagrama identificativo de la RFEF o de la competición de Primera División RFEF de Fútbol Femenino y Segunda División RFEF de Fútbol Femenino que establezca la RFEF, sin que puedan portar ningún parche, logotipo o emblema dentificativo de otras asociaciones o entidades o cualquiera otro no autorizado por la RFEF».

Las actas arbitrales recogen los diferentes incumplimientos y, sin ir más lejos, en la de la colegiada Ylenia Sánchez Miguel, que dirigió el partido del pasado sábado entre Real y Betis, se puede leer en el apartado de «Otras incidencias» la referencia a la ausencia del logotipo de la RFEF en los uniformes de los dos equipos. «Otras incidencias: Hago constar que las jugadoras del equipo visitante, Real Betis Balompié SAD, no lucen en la manga de sus camisetas el anagrama de la competición.Otras incidencias: Hago constar que las jugadoras del equipo local, Real Sociedad de Fútbol SAD, no lucen en la manga de sus camisetas el anagrama de la competición», señala la colegiada en el acta del encuentro.

Comunicado conjunto

Los clubes tienen diez días para recurrir la decisión del Juez Único de Competición y por la tarde de este viernes, los tres han emitido el mismo comunicado en el que solicitarán el amparo del Consejo Superior de Deportes. 

Los tres «declaran su mayúscula sorpresa ante la decisión del Juez Único de  Competición de aplicar una sanción absolutamente desproporcionada en relación con la supuesta infracción previamente descrita. Las graves consecuencias disciplinarias adoptadas afectan al ámbito deportivo y al institucional; de esta manera se pretende coaccionar a los Clubes cuyo comportamiento únicamente tiene que ver con la defensa de sus legítimos derechos».

En opinión de los clubes sancionados, la RFEF «no ha aceptado todavía la calificación de competición profesional  de la liga de fútbol femenina» y «continúa comportándose como si esta decisión no se hubiera producido y la competición fuera no profesional». Consideran, en este sentido, que la sanción «afecta a la integridad de la competición y no tiene sustento legal, ya que el reglamento de la RFEF sólo obliga a poner parche RFEF en competiciones no profesionales».

Anuncian que lucirán el logo de la Federación Española «contra su voluntad desde esta misma jornada y lo harán para no empeorar la situación en consideración a la persecución a la que consideran que están siendo sometidos. Los equipos que militan en ligas profesionales son propietarios de los derechos publicitarios de sus equipaciones y titulares de los ingresos que la promoción de la Liga genere a través de los parches en las camisetas. La RFEF pretende que los equipos luzcamos su logo y el de su patrocinador principal de manera obligatoria y gratuita lo cual carece de soporte legal». 

Declaran, asimismo, que los tres clubes «destinarán sus mayores esfuerzos para defender sus intereses en los diferentes órganos judiciales y administrativos. El Consejo Superior de Deportes, en su labor de mediación entre la RFEF y las ligas profesionales, ya ha tenido que intervenir a lo largo de la presente temporada para modificar circulares emitidas por la RFEF en relación con la liga de futbol profesional femenina. Los tres Clubes queremos anunciar que solicitaremos su amparo».

Concluyen el comunicado abogando por «un fútbol femenino profesional libre de conflictos institucionales, donde las únicas partes afectadas son los aficionados, las jugadoras y los clubes que apuestan por construir este deporte cada día».