EH Bildu reivindica la necesidad de buscar nuevas fórmulas para hacer frente a las consecuencias socioeconómicas derivadas de la covid-19 en Bilbo, ya que el presupuesto para el 2022 al que el Gobierno municipal de PNV-PSE dio luz verde el pasado lunes «no recoge medidas ni estructurales ni suficientes para hacer frente a las necesidades que tenemos en la ciudad».

De esta manera, ha apelado a un «pacto por la recuperación» en Bilbo que contemple «medidas ambiciosas para responder a los retos que a los que nos enfrentamos y ayudar a todas las personas, familias y sectores perjudicados».

La portavoz de la coalición soberanista Jone Goirizelaia ha lamentado que el presupuesto aprobado «no responde a la situación actual con 23.780 personas paradas en la ciudad, ensanchamiento de la brecha digital y educativa, y situaciones duras de pobreza».

Para hacer frente a este contexto, en el que además la situación socio sanitaria «sigue siendo muy preocupante», según ha dicho, «necesitábamos un presupuesto que se convirtiera en un verdadero instrumento para la recuperación, pero PNV-PSE se han negado a ello y han vuelto a remitirnos al Plan Bilbao Aurrera».

A su juicio, «en estos momentos volver a plantear un nuevo Plan Bilbao Aurrera para hacer frente a las consecuencias de la pandemia, carece de sentido, ya que éste se creó para hacer frente a unas necesidades urgentes, debido a una situación imprevisible, y en estos momentos la situación y sus consecuencias son de sobra conocidas por todas».

Goirizelaia ha destacado que lo que «es evidente que en Bilbao necesitamos urgentemente» medidas para hacer frente a las consecuencias socio-sanitarias del covid y, en ese sentido, «teniendo en cuenta que se ha perdido una oportunidad con el presupuesto», ha instado en «buscar nuevas fórmulas para hacerlo para que nadie se quede atrás».