Mikel Insausti
Crítico cinematográfico

El encanto de Colombia

Ya a nadie extraña que los escenarios naturales de una película pongan de moda un determinado lugar. Incluso un anuncio televisivo basta para que más visitantes se arcerquen hasta el Baztán, por poner un ejemplo bien cercano. Pero lo más sorprendente es que unos dibujos animados sirvan para disparar el potencial turístico de todo un país. La película de Disney ‘Encanto’ (2021) se ha convertido en la mejor publireportaje de Colombia, gracias a que capta la magia de su colorida naturaleza y de sus pueblos llenos de casitas coloniales que parecen en sí mismas las maravillosas ilustraciones de un cuento o cualquier fábula.

Es el resultado de un gran trabajo de documentación, ya que el equipo de la película se recorrió toda la geografía colombiana, buscando los rincones más abruptos y escondidos, siempre con el debido asesoramiento antropológico y cultural. Esto implica mucho respeto tanto hacia la población nativa como hacia el público familiar que va a ver la película en cualquier parte del mundo, al contrario de muchos productos infantiles que menosprecian la sensibilidad y la inteligencia del menor.

La casa mágica de la familia Madrigal está en la zona cafetera, en el Valle de Cocora, perteneciente al departamento de Quindío, con sus famosas y gigantescas Palmeras de Cera. Una arquitectura visible en poblaciones como Salento, Cartagena, Barichara o Villa de Leyva.