La portavoz de Geroa Bai, Uxue Barkos, ha dejado claro este miércoles que las fisuras en la confianza de los socios de Gobierno a raíz del pacto PSOE-UPN no se han cerrado, y ha vuelto a exigir a María Chivite, esta vez en en el programa ‘En Jake’ de EiTB, que haga públicos los entresijos del acuerdo. La lehendakari de Nafarroa había señalado en declaraciones previas que no le corresponde informar sobre este asunto porque no participó en las negociaciones, reconociendo explícitamente que el PSN volvió a acatar lo que decidió Ferraz.

Chivite ha resaltado al término de un acto celebrado en la Universidad Pública de Nafarroa que, aunque estuvo informada de la marcha de las negociaciones sobre la reforma laboral, no participó en las mismas, y por tanto no le corresponde informar sobre este asunto ni como presidenta del Gobierno de Nafarroa ni como secretaria general del PSN.

«Yo todos los acuerdos que como presidenta he llegado los he hecho públicos y los habéis conocido los medios de comunicación, porque era una competencia mía, pero efectivamente lo que no era competencia mía no tengo por qué comentarlo y respeto además que quienes han llegado a esos acuerdos son los que, si quieren hacerlo, lo comenten», ha subrayado Chivite.

Tras resaltar en que lo negociado «son competencias que nada tienen que ver con el Gobierno de Navarra», ya que el contenido del pacto afecta «solo a competencias estatales», Chivite se ha desmarcado del mismo y ha rehuido el debate señalando que «el contenido del acuerdo lo tendrán que contar las personas que han llegado a ese acuerdo», algo que Barkos no entiende.

De esta manera, sus socios sugieren que el tímido papel del PSN en la negociación no sirve de coartada para evadir responsabilidades y externalizar culpas. «Es obligación del PSN aclarar el pacto que tienen los socialistas con UPN, y le corresponde hacerlo a Chivite, como presidenta del Gobierno de Navarra», ha señalado Barkos.

En este sentido, la portavoz de Geroa Bai ha insistido en que «es obligación del PSN aclarar el pacto que tienen los socialistas con UPN, y le corresponde hacerlo a Chivite, como presidenta del Gobierno de Navarra». Según ha señalado, el PSN han compartido «algunos términos del acuerdo» con los socios de Gobierno, pero «no los asuntos a los que se refiere en este momento Javier Esparza». 

«En democracia el elemento mínimo es la transparencia, por lo que el PSN está obligado a hacer público el acuerdo», ha agregado Barkos.

La portavoz de Geroa Bai también ha dicho que las disputas internas de UPN no pueden erosionar el actual Gobierno de Nafarroa. «Está claro que existe un acuerdo, pero que Chivite no quiere contarlo. Si en ese acuerdo hay elemento que afectan a la convivencia de navarros y navarras, claro que le corresponde contarlo», ha subrayado.

El PSN señala que el pacto no afecta al Gobierno de Nafarroa...

Tras la reunión de la Mesa y Junta de Portavoces del Parlamento navarro, en sucesivas ruedas de prensa, todos los socios y apoyos cuestionaron el acuerdo, en unos casos por la pérdida de confianza que puede suponer y en otros porque era un intento de exclusión, algo propio de la vieja política, mientras que el PSN aseguró que las relaciones quedan «de la misma manera».

En esa misma línea, el vicepresidente de Nafarroa Javier Remírez ha asegurado este miércoles que el acuerdo al que llegó UPN con el PSOE para apoyar en el Congreso la reforma laboral «en nada afecta al Gobierno de Navarra».

En rueda de prensa tras el consejo semanal del Ejecutivo, Remírez ha indicado que fue el Gobierno español el que inició las conversaciones con los grupos parlamentarios sobre la reforma laboral y lo que se ha negociado son «cuestiones que tienen que ver con ese ámbito competencial».

«Ninguno de los contenidos afecta al ámbito competencial del Gobierno y de eso fueron informados desde el minuto uno los socios», ha aseverado, y subrayado que en el Ejecutivo «en ese punto» están «tranquilos» ya que se ha generado «una polémica artificial».

...y UPN que no altera la coalición Navarra Suma

Pero la dramática votación de la reforma laboral también ha levantado un gran revuelo en la coalición Navarra Suma. Ana Beltrán, líder del PP de Nafarroa, afirmó este martes en declaraciones realizadas a ‘Diario de Navarra’ que le preocupan «los escarceos de Esparza con los socialistas». 

Además, la diputada señalaba que no le importa que UPN pactara con el PSOE el ‘sí’ a la reforma laboral, sino el alcance de un acuerdo que podría poner en riesgo a Navarra Suma.

Sin embargo, el alcalde de Iruñea y vicepresidente de UPN, Enrique Maya, ha asegurado este miércoles que los asuntos internos de su partido «no van a afectar» a la coalición, y en esa línea ha sostenido que «en el Ayuntamiento todo sigue igual».

Así se ha referido el alcalde en declaraciones a los medios de comunicación donde ha hablado de la situación generada en el seno de Unión del Pueblo Navarro tras el voto, en contra del mandato del presidente, de sus dos diputados en Madrid.

«El Comité de Disciplina es independiente y no sé cuántos días puede llevarles tomar una decisión», ha señalado Maya, quien ha recordado que votó a favor de que Sergio Sayas y Carlos García Adanero entregaran sus actas o fueran expulsados del partido.

Este martes miembros de UPN, dentro de la ronda que están llevando a cabo por diferentes localidades, se reunieron en Tutera, donde abordaron este asunto y «se habló de lo que se tenía que hablar, dimos las explicaciones que teníamos que dar y todo acabó muy bien». Maya considera que el encuentro fue «muy positivo».

En cuanto al acuerdo al que UPN y PSOE llegaron para que su partido diera su apoyo a la reforma laboral, Maya ha indicado que «será Javier Esparza quien, si lo considera adecuado, desvele los términos del acuerdo».

El vicepresidente del partido ha asegurado que la situación de UPN «se resolverá» y que en ningún momento va a afectar a su labor de alcalde de Iruñea.

De lo que ha trascendido hasta el momento, en lo relativo al Ayuntamiento de Iruñea, el acuerdo contemplaba la aprobación por parte de PSN de una modificación presupuestaria y la no reprobación del alcalde por sus declaraciones xenófobas en relación con los menores no acompañados, la primera parte se cumplió pero la segunda no, ya que el cambio de voto de UPN en el Congreso hizo que finalmente saliera adelante la reprobación a Enrique Maya.