Lo dijo la reelegida secretaria general de EA, Eba Blanco, en su discurso de clausura del XIII Congreso: «Quiero mirar al futuro; este fin de semana hemos dado un paso importante para que EA siga aportando políticamente, como siempre lo hemos hecho, a Euskal Herria, en el seno de EH Bildu. Esto es lo que algunos han intentado poner en peligro en este congreso. Si se hubiese aprobado la enmienda a la totalidad que presentaron a la ponencia política, en la práctica habría situado a EA fuera de EH Bildu». Y a esto añadió un nítido «pero ese capítulo lo hemos cerrado este fin de semana. Ya está cerrado. Ahora nos toca a todas y a todos ponernos a trabajar con disciplina. Queda poco más de un año para la próxima cita electoral, las elecciones municipales y forales».

El deseo de la nueva dirección es concentrarse en su trabajo interno, lo que consideran que no han podido hacer en los últimos años envueltos en disputas internas que han llegado incluso hasta los tribunales.

Buena parte de que este deseo pueda cumplirse dependerá de la estrategia que en adelante siga el sector crítico. De momento, en sus actos paralelos al congreso decidieron constituir un «grupo motor de democratización», que tomará el relevo de Maiorga Ramírez y del resto de miembros de esta corriente que han sido suspendidos de militancia por los órganos del partido, con el objetivo dijeron de «rebelarse» contra las «injusticias» del sector oficial.

Sin embargo, se trata de una declaración que de momento no tiene ninguna concreción dada a conocer públicamente. La portavoz de ese «grupo motor» es Esther Larrañaga, que como el resto de sus componentes no tiene cargos orgánicos en el partido, por lo que es difícil saber qué tipo de acciones contemplan en su «rebelión» democratizadora.

Entrevistada ayer en Radio Euskadi, la secretaria general de EA, Eba Blanco, aseguró desconocer cuáles serán los planes de este grupo, aunque anunció que seguirá con atención las noticias que puedan ir dando a través de los medios de comunicación.

Puentes rotos

Los puentes de relación entre la dirección de EA y el sector crítico estaban ya rotos antes de este Congreso y será difícil que se reconstruyan en los próximos meses. De hecho, ninguna de las partes incluyó en sus respectivos discursos los manidos llamamientos al acuerdo, aunque sean tan retóricos como hipócritas. Lo único que hubo fue un intercambio de reproches.

En su entrevista de ayer, Eba Blanco explicó que desde la dirección intentaron en su día tender esos puentes. Que se crearon dos mesas cuando ya estaban en marcha las denuncias judiciales de los críticos, una sobre la relación con EH Bildu y la otra sobre el acceso a la base de datos. Pero aseguró que «me di cuenta de que lo que hablábamos un día al día siguiente no valía». «Quisieron seguir adelante con el proceso judicial y no quisieron hablar, pese a que hayan dicho lo contrario y, desde entonces, se cortó la comunicación», señaló.

Al entender de la secretaria general, «ellos han tenido muy clara cuál era su estrategia, intentar ganar en los medios de comunicación y en los tribunales lo que no ganaban en los órganos del partido». También dejó constancia de que los críticos en ningún momento tuvieron intención de participar en el XIII Congreso, puesto que «el Palacio Europa no se coge de un día para otro y las tarjetas de votación no se preparan en diez minutos».

EA, fundamental para EH Bildu

La ponencia aprobada en el Congreso certifica que «la aportación de EA a la federación EH Bildu es fundamental, puesto que tiene gran experiencia democrática, mantiene un firme compromiso ético en la defensa de los derechos de todas las personas, sostiene ideas independentistas radicales y socialdemocráticas, y cuenta con un apoyo social que no está al alcance del resto de partidos que componen EH Bildu».

Entiende que «EH Bildu es la herramienta que en la actualidad mejor puede ayudar a EA a lograr la materialización del artículo 1 de sus estatutos», que señala que el objetivo principal del partido es «la independencia de Euskal Herria».

Junto a ello, en el documento aprobado, EA se «reafirma en su apuesta por la recién aceptada ponencia organizativa-estatutaria de EH Bildu, y subraya los principios generales y principios de funcionamiento que en la misma se recogen. En dicha ponencia se definen, entre otros, los órganos de gobierno de EH Bildu, así como la representación que los partidos políticos tendrán en ellos».