«Los periodistas somos objetivo de Marruecos, no quiere testigos»
Ahmed Ettanji es cofundador y presidente del grupo de periodistas saharauis Equipe Media, y colabora también con varios medios de comunicación. Recientemente participó en unas charlas organizadas en Iruñea por organizaciones amigas del Sahara.
Ahmed Ettanji recibe a NAIZ en el domicilio de su «familia de Euskal Herria». Aterrizó hace menos de un mes junto a su esposa, Nazha El Khalidi, también periodista y activista, y su hijo recién nacido. Esta entrevista se produce antes de la entrada de tropas rusas en Ucrania, pero Ettanji profundiza en una guerra más silenciada. El cofundador de Equipe Media repasa la actualidad del Sahara Occidental, detalla la nueva oleada represiva iniciada por la ocupante Marruecos y reflexiona sobre la situación de una de las numerosas víctimas de este conflicto descuidado por los medios: el propio periodismo.
Tras la incursión de tropas marroquíes en Guerguerat, se dio por roto el alto el fuego en el año 2020. Desde entonces, ¿qué situación vive el Sahara Occidental?
Después de la ruptura del alto el fuego por parte de Marruecos, se inició la guerra entre el Frente Polisario y las fuerzas ocupantes marroquíes y, desde entonces, Marruecos no ha respetado los convenios de Ginebra. Está matando a civiles y bombardea con drones a beduinos, pastores y niños. En la parte ocupada ha aumentado muchísimo la represión. Siempre la ha habido, porque vivimos en un territorio bajo bloqueo militar e informativo, pero ahora se ha intensificado. Hablamos de allanamientos en casas, detenciones, arrestos domiciliarios, torturas... También ha empeorado la situación de los presos políticos, que no tienen contacto con el mundo exterior y no reciben visitas de familiares, llevan años en aislamiento. La situación es muy difícil.
Tras la ruptura del alto el fuego, el expresidente de EEUU Donald Trump reconocía la soberanía de Marruecos sobre el Sahara Occidental a golpe de tuit. ¿Condicionó ese mensaje la situación del conflicto?
El tuit de Trump no ha llegado más allá; al revés, ha traído una atención mediática muy importante. Todo el mundo habla de Palestina, pero ha demostrado que para apoyar a Israel y su ocupación hay que apoyar a Marruecos y su invasión al Sahara Occidental. Ha demostrado cómo se vende el Derecho Internacional y los derechos de los pueblos a la autodeterminación. Además, en EEUU, hemos visto cómo, incluso dentro del Partido Republicano y también en el Partido Demócrata, están en contra de la decisión de Trump, porque es ilegal. Incluso después ha habido decisiones del Congreso en contra de Marruecos. El tuit no ha llegado mas allá, ha sido una proclamación y no un decreto, no ha sido votado por las cámaras.
¿Se han producido avances desde el nombramiento de Staffan de Mistura como enviado especial de la ONU para el Sahara Occidental?
No ha habido avances. Esperemos que tenga refuerzos y apoyos de otros Estados para que haya una voluntad de empujar a una solución que contemple el derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui.
La nuevas generaciones forman uno de los sectores más activos en el retorno a la vía armada. ¿A qué se debe?
La guerra en el Sahara es una guerra de generaciones. Tras la primera que inició la guerra, después del alto el fuego nació otra que no la ha conocido y ha seguido en la lucha pacifica, creyendo en el Derecho Internacional y en la comunidad internacional. Pero estas han dado la espalda al pueblo saharaui, lo han vendido y han puesto los intereses económicos por encima de los derechos humanos. La última generación saharaui siempre ha apostado por al paz, pero se han frustrado y han perdido confianza en la ONU. Por tanto, han visto que la única salida para que sean escuchados es la lucha armada. Hay muchos jóvenes que vivían en Europa, en buenas condiciones, y han decidido bajar al frente para luchar y defender la independencia del Sahara Occidental, porque esta no va a venir de fuera, la van a traer los hombre y mujeres saharauis. Pero hay una complicidad internacional muy potente, sobre todo en Europa y también en España, que es responsable histórico, jurídico y ético del conflicto. Dejó al pueblo saharaui abandonado y ha apoyado la ocupación. Y Francia siempre ha defendido los intereses de Marruecos.
Hace poco, el Sáhara volvía a los titulares occidentales por la hospitalización del líder del Frente Polisario y presidente de la República Árabe Saharaui Democrática, Brahim Ghali, en el Estado español, y también por el envío masivo de civiles por parte de Marruecos.
El recibimiento a Ghali, que estaba en estado crítico afectado por el covid-19, fue un gesto humanitario. Por otro lado, Marruecos quería presionar a España para que reconozca la soberanía marroquí en el Sahara. Además, Marruecos ha mostrado al mundo que utiliza una política de matones: si no me apoyas para violar el derecho internacional, voy a emplear mis métodos de chantaje para presionar a la UE , utilizando menores y gente que vive en la miseria y que atraviesan la frontera.
La activista saharaui Sultana Jaya ha denunciado la violación a familiares, allanamientos, vigilancia... ¿En qué situación se encuentran los activistas saharauis en las zonas ocupadas?
Los activistas saharauis vivimos en una cárcel al aire libre, condenados a una libertad condicional porque en cualquier momento puedes entrar en prisión. Sultana Jaya lleva 470 días bajo arresto domiciliario ilegal solo por el hecho de levantar y ondear la bandera de la RASD. Lleva este tiempo encerrada en su casa, junto a su hermana y su madre, de 85 años y con diabetes. A lo largo de todo este tiempo, la casa ha sido allanada de madrugada por paramilitares marroquíes, han agredido, torturado y violado sexualmente a las hermanas Jaya en varias ocasiones. Incluso llegaron a inyectarles unas inyecciones intramusculares cuyo contenido no se sabe qué es. Además, cabe mencionar que últimamente en Dajla hay muchas personas que han sido tratadas violentamente solo por el hecho de protestar por la desaparición de un joven saharaui, cuyos huesos fueron encontraron cortados y calcinados. No han querido entregar los restos, y la familia pide una investigación independiente.
¿Y la de los periodistas locales? ¿Cuál es la labor de Equipe Media? ¿Por qué se funda?
El Sahara Occidental no es un país para el periodismo, es un desierto informativo como lo ha definido Reporteros Sin fronteras en un informe exhaustivo. Allí el periodismo no existe, está criminalizado. Nosotros no ejercemos el periodismo por trabajo, sino por necesidad: no existen agencias internacionales, no hay quien grabe o levante la voz de los oprimidos. En 2019 decidimos crear Equipe Media con el objetivo de romper este bloqueo informativo. Trabajamos clandestinamente, y somos el primer objetivo de las fuerzas de ocupación marroquíes. ¿Por qué? Porque mostramos lo que no quieren que se sepa: violaciones de derechos humanos y el expolio de los recursos naturales de las zonas ocupadas. Ganamos credibilidad en medios internacionales porque l es creíble y verificado. Incluso relatores de la ONU utilizan nuestra información.
Y eso enfurece a Marruecos.
Sí, por ello han sido detenidos varios periodistas, sufren difamaciones, torturas, malos tratos, despidos y confiscaciones de material. Hay seis periodistas detenidos en las cárceles marroquíes, condenados a 30 años o a cadenas perpetuas por el mero hecho de informar o llevar una cámara para grabar un testimonio de una víctima de las fuerzas de ocupación. Nuestro trabajo también es desmentir la propaganda de Marruecos que dice que existen y se respetan todos los derechos fundamentales. El bloqueo también afecta a los observadores, a periodistas que bajan al territorio ocupado, porque es inaccesible, Marruecos no quiere testigos.
¿Cómo definiría la cobertura del Sáhara Occidental en los medios occidentales?
El Sahara Occidental vive uno de los conflictos mas cercanos al continente europeo, sea a nivel geográfico, de seguridad o económico, pero es uno de los territorios más olvidados y silenciados por los medios. Éticamente creo que muchos periodistas deben involucrarse más respecto a lo que ocurre allí.
¿Abundan las «fake news» al tiempo que escasea la información veraz?
El Sahara Occidental es una de las zonas de donde más fake news salen. La propaganda marroquí invierte mucho dinero en medios de comunicación marroquíes para vender que la situación es normal, pero también paga a periodistas occidentales para publicar mentiras, tanto en España como en Europa. Lo demostraron documentos confidenciales publicados en redes sociales.