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Gasteiz

Tapia asegura que Euskaltel no peligra por la fusión MásMóvil-Orange, «sino todo lo contrario»

Orange y MásMóvil han iniciado la negociación para fusionarse en el Estado español. El Gobierno de Urkullu ha asegurado que ha estado al tanto «desde el primer momento» y Arantxa Tapia se ha mostrado convencida de que, en caso de que prospere, Euskaltel no desaparecerá, «sino todo lo contrario».

Euskaltel mantiene su red comercial en Hego Euskal Herria.
Euskaltel mantiene su red comercial en Hego Euskal Herria. (Endika PORTILLO | FOKU)

Orange y Lorca Jvco (propietaria de MásMóvil) han comenzado a negociar en exclusiva la fusión de sus negocios en el Estado español en una sociedad conjunta al 50% que tendría una valoración de 19.600 millones de euros y que prevén sellar antes de verano.

La firma resultante integraría los activos de Orange España, valorados en 8.100 millones de euros, y los de MásMóvil, 11.500 millones, según han anunciado ambas compañías en una nota conjunta este martes.

Prevén firmar la operación en el segundo trimestre de este año con la idea de que esté concluida en el segundo trimestre de 2023, una vez obtenidas las oportunas aprobaciones de las autoridades administrativas, de competencia y regulatorias. De este modo se crearía el segundo gran operador del Estado, muy cerca de Telefónica, cuya capitalización este lunes ha sido de 22.500 millones de euros.

El acuerdo entre Orange y Lorca contempla el derecho de la sociedad resultante a lanzar una oferta pública de venta (OPV) bajo ciertas condiciones acordadas por las partes, teniendo en cuenta que ambas tendrían los mismos derechos de voto en la entidad resultante.

El control de Euskaltel vuelve a cambiar de manos

De culminar la operación en esos términos, Euskaltel, que nació como una empresa pública, volverá a cambiar de manos en menos de un año. MásMóvil se hizo con el 98% de las acciones de la operadora vasca en agosto de 2021 a través de una oferta pública de adquisición (OPA), lo que dio pingües beneficios a sus principales accionistas en ese momento: Kutxabank, que se embolsó unos 390 millones de euros, y Zegona.

La operación se había lanzado el 27 de marzo e incluía una serie de garantías en relación al Grupo Euskaltel (conformado por Euskaltel, R y Telecable) que tenían que ver con el mantenimiento del empleo, además de sus marcas y las sedes sociales, al menos, durante cinco años.

Tras saltar este martes la noticia, la consejera de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia, ha asegurado que el Gobierno de Lakua ha estado al tanto «desde el primer momento» y se ha mostrado convencida de que, en caso de que prospere la fusión, Euskaltel no desaparecerá, «sino todo lo contrario».

«Desde luego, en ningún momento veo la posibilidad de que Euskaltel desaparezca, todo lo contrario», ha dicho Tapia en la rueda de prensa tras el Consejo de Gobierno que ha tenido lugar en Gasteiz. Y ha puntualizado que «en ningún caso» se modificarán las condiciones en las que se produjo la operación con MásMóvil «porque así se nos ha transmitido».

A su juicio, Euskaltel «pasará a formar parte de una gran empresa», destacando que «el acceso a todas las posibilidades de últimas tecnologías sería aún mayor».

«Es decir, las garantías a Euskaltel quedan perfectamente integradas si se produce esta fusión que se ha anunciado. Pero vamos a verlo. Todavía no es más que un anuncio inicial de una exclusividad en ese trabajo. Vamos a ver cómo evoluciona», ha concluido.

Por otro lado, cabe recordar que en noviembre pasado MásMóvil también se hizo con el control total de Guuk, otro operador vasco de telefonía.

El comité de empresa teme nuevas «medidas traumáticas»

El comité de empresa de Euskaltel, por su parte, ha expresado su temor ante la posibilidad de que la fusión entre Orange y MásMóvil afecte negativamente al empleo porque «este tipo de operaciones siempre conlleva medidas traumáticas».

En declaraciones a Europa Press, el presidente del comité, Javier del Blanco (CCOO), ha explicado que han tenido conocimiento de este proceso a través de una comunicación interna que el consejero delegado de MásMóvil, Meinrad Spenger, ha remitido esta mañana a toda la plantilla del grupo. Pero no han recibido ninguna información concreta y, por ello, a lo largo de la jornada tratarán de ponerse en contacto con los responsables de Euskaltel.

Blanco se ha mostrado convencido de que el empleo se verá afectado si prospera esta operación. «Segurísimo. Este tipo de operaciones siempre conlleva medidas traumáticas y es lo que desagrada, siempre hay un gran movimiento de capital, sobre todo, entre inversores y personal de alta dirección y, curiosamente, luego los efectos negativos suelen ser para las plantillas», ha comentado.

«Una vez más, se pone de manifiesto que esas sinergias que salen como consecuencia de los estudios previos siempre llevan aparejadas medidas de este tipo –ha añadido–. Eso es lo que rechazamos, porque queremos favorecer el empleo y estabilizar el empleo».

También ha expresado sus dudas respecto a que el control de Euskaltel se mantenga en Euskal Herria y ha indicado que «el arraigo que entiende Arantxa Tapia es muy diferente al que entiende» el comité de empresa.

Ha recordado que, en la operación anterior, ya pusieron en duda esas garantías porque «estaban sujetas a condiciones de mercado y a otros aspectos» que «dejaban a MásMóvil libre para hacer lo que quisiera en cada momento». «Este sería un escenario similar. A nosotros nos gustaría ver qué garantías extras o en qué se va a apoyar Arantxa Tapia para evitar que pueda haber salidas de personas dentro del Grupo Euskaltel», ha advertido.