Daniel   Galvalizi
Periodista

Feijóo y Ayuso tienen su primer mitin conjunto en Madrid tras sepultar la etapa Casado

La dupla que se alió para acabar con el exlíder del PP mostró su sintonía en la capital española. El presidente de la Xunta hizo énfasis en bajar impuestos y apuntó al electorado de Vox. La presidenta madrileña le dio su apoyo pero recordó que el PP regional «tiene poco aguante para imposiciones».

Alberto Feijóo e Isabel Díaz Ayuso, en el acto de anoche.
Alberto Feijóo e Isabel Díaz Ayuso, en el acto de anoche. (Alberto Ortega | Europa Press)

Un hotel del centro madrileño abarrotado recibía anoche al presidente de la Xunta de Galiza, Alberto Núñez Feijóo, y a la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en lo que fue el primer mitin conjunto desde que se abrió la carrera para renovar el liderazgo del PP tras la caída de Pablo Casado, cuyos artífices principales fueron justamente los protagonistas del evento.

Con música triunfalista, Feijóo y Ayuso entraron al salón de eventos en donde los esperaba un escenario con un gran cartel con el eslogan de ‘Preparados’ y el símbolo del PP con un azul más oscuro y sobrio que el que se usaba hasta hace poco. La estética del diseño también empezó una nueva etapa.

En primera fila estaba la plana mayor del PP regional y de los dirigentes históricos que transitan los pasillos políticos de la capital hace tiempo, como la exministra Ana Pastor o el ex portavoz Rafa Hernando. Sobre el escenario, Feijóo se preocupó de posar para los fotógrafos dando un medio abrazo a Ayuso todo el tiempo, apoyando su mano en su hombro izquierdo. Era la esperada foto de la unidad de los vencedores de la disputa brutal que sacudió al partido durante febrero.

A pocos días de cumplirse un año de la disolución de la Asamblea de Madrid tras  la moción de censura en Murcia, Feijóo visitó la capital del Estado para mostrar su sintonía con Ayuso y el alcalde Martínez-Almeida y su apoyo a la continuidad de éstos. El líder municipal sale ileso de la guerra interna en la que se vio inmerso tras conocerse el presunto espionaje paralelo a la presidenta.

«A rey muerto, rey puesto» es un refrán castellano que la política suele volver realidad. La derecha española aupó a Feijóo con la misma velocidad en que hizo añicos a Casado. Almeida, en su breve discurso, lo demostró: «Intentaremos que llegues lo antes posible a la Moncloa. Frente a la política del corto plazo está la de la confianza y tranquilidad. Presidente, representa todos los valores del PP, nos identificamos con ellos», afirmó el que fuera hasta hace poco el alfil que usaba la Ejecutiva anterior para ensombrecer el ascenso ayusista.

«Ni tonterías ni imposiciones»  

Ayuso y Feijóo compartieron el escenario mientras dieron sus discursos, para que las cámaras capten las reacciones mutuas. La imagen de unidad en acción para cerrar las heridas. El presente del PP pasa por esta alianza forjada entre ambos líderes, que representan los dos tonos que conviven en la familia conservadora española: el trumpismo y la derecha de gestión. La crispación y la exaltación ideológica están en retirada, al menos en los planes.

«Hoy somos todos un mismo equipo presidente. Gracias por dar el paso. De todos los miles de afiliados, la persona que ha bajado al toro eres tú. Anda que había gente, pero lo has hecho tú. Has demostrado todo en política, eres capaz de unir a ciudadanos de izquierda a derecha con cuatro mayorías absolutas. Ya quisiera una para mí», señaló Ayuso.

En apelación a esa unidad, la presidenta de Madrid dijo que Feijóo dio «paz en el partido y en el centro derechaç, dijo que el Estado español necesita «solvencia» y prometió: «Vamos a dialogar entre nosotros. Tenemos un momento único para acertar o para ser irrelevantes y eso no nos lo podemos permitir».

Tras subrayar que Feijóo es muy diferente a Sánchez porque «no mienteç, se permitió enviar un mensaje que algunos interpretaron como una pulla o indirecta a tener en cuenta para el futuro: «Los madrileños no tenemos paciencia, no pactamos miseria. Somos un mensaje nacional, un retaguardia, un equipo de soldados que te vamos a acompañar en este momento critico. Un equipo con poco aguante para las tonterías y poco aguante para las imposiciones. Vamos a darlo todo para un proyecto que vaya para adelante. Para devolver la paz al PP».

Lo de las imposiciones puede ser entendido como una referencia a la Moncloa o también, en clave interna, a la disputa con la dirección de Casado y García Egea que intentó por todos los medios que el ayusismo no copara la Ejecutiva del PP madrileño, lo que acabó cosechando la tempestad que se vio el mes pasado. No hubo mención al respecto pero nadie duda ahora que la presidenta asumirá la dirección regional del partido tras el congreso extraordinario de abril que ungirá a Feijóo.

El candidato agradeció a Madrid «lo que está haciendo por el PP de toda España» y el aval recibido, y mostró una foto de Ayuso con Almeida y afirmó: «Éste es el tandem electoral que tiene Madrid». Con críticas a los políticos que quieren «separar» a los españoles y contra la política «de tribus y odios», Feijóo dijo que «los votantes merecen respeto y por eso» en la nueva etapa no se va a hablar «de políticos sino de políticas», y enfatizó: «No voy a aceptar ni menosprecios ni complejos ni vacilaciones contra el PP».

«Somos el mayor partido de España y representamos a la gran nación española, los únicos que lo hacemos», aseguró, y en tono de batalla cultural añadió: «El centro no es lo que diga el PSOE que es el centro. El centro es todo aquello que preocupa a la mayoría de los ciudadanos y la política centrada es aquella que viene a resolver lo que preocupa a la mayoríaç.

El presidente gallego dedicó un buen rato a la apología de la bajada de impuestos, elogió a Ayuso y su «defensa de Madrid» durante la pandemia con una «entereza» que dijo haberlo «impactado para siempre» y dejó para el final un guiño al electorado decepcionado del PP que se fue con la ultraderecha.

Sin nombrar a Vox, aseveró: «Yo vengo a no renunciar a una mayoría contundente. Este no es mi congreso, es nuestro congreso. No sobra nadie, nos faltan todos los que se han ido y todos los que si les damos una oportunidad, volverán. A todos les esperamos en casa».

La gira de Feijóo por todo el Estado ya incluyó además Canarias, Murcia, València, Aragó, Illes Balears, Catalunya y Toledo. Este viernes iba a visitar Bilbo e Iruña pero fue pospuesto al 25 de marzo por la realización del funeral en memoria de las víctimas del pesquero Pitanxo.