Joseba Salbador Goikoetxea

Belate contará con un túnel en cada sentido

Con un presupuesto de 153 millones de euros, la duplicación de los túneles de Belate y Almandoz constituirá una de las mayores obras de infraestructura de Nafarroa

Un camión accede al túnel de Belate en dirección a Iruñea.
Un camión accede al túnel de Belate en dirección a Iruñea. (Jagoba MANTEROLA | FOKU)

Después de la construcción de los apartaderos realizada en 2018 para adecuarse a la normativa de seguridad europea, el Gobierno navarro tiene previsto adjudicar a finales de este año el desdoblamiento de los túneles de Belate y Almandoz, con el fin de que los dos sentidos de la circulación dejen de hacerlo por el mismo túnel, algo que incrementa la peligrosidad de este tramo de la N-121-A.

Los trabajos tienen un presupuesto estimado de 153 millones de euros y su plazo de ejecución se prolongará durante tres años, por lo que se convertirá en «la obra de mayor envergadura que va a acometer Navarra en los próximos años», en palabras de la presidenta Maria Chivite.

Y es que el proyecto contempla la construcción de un túnel paralelo al actual tanto en Belate como en Almandoz, con el fin de que cada sentido de la circulación discurra por una galería independiente y con dos carriles.  

En lo que se refiere a la obra de Belate, esta tendrá un coste de 90,4 millones de euros. La nueva galería tendrá 2,88 kilómetros de longitud, una distancia similar a la del túnel actual, con el que estará conectado a través de cinco galerías peatonales cada 500 metros. La galería central permitirá el paso de vehículos de emergencia.

El desdoblamiento del túnel de Almandoz tendrá un coste de 43,3 millones de euros. La nueva galería tendrá una longitud de 1,35 kilómetros, es decir, 160 metros más que el actual, y contará con dos galerías de conexión peatonales.

Además de la duplicación de los túneles, el proyecto contempla asimismo la construcción de un nuevo viaducto de 210 metros entre ambos túneles, así como otra serie de actuaciones en los dos extremos para salvar los desniveles que, en total, abarcarán un tramo de 7,6 kilómetros. El coste de estos trabajos a cielo abierto asciende a 19,5 millones.

Durante la ejecución de esta obra se prevé mantener el tráfico actual, a excepción de momentos puntuales. Una vez ejecutadas las obras, todos los túneles de la Red Transeuropea de más de 500 metros en la red de carreteras de Nafarroa estarán completamente adaptados a los requisitos de seguridad de la directiva europea.

Elevada siniestralidad

La N-121-A, que une Iruñea con Behobia, es una de las carreteras que mayor siniestralidad registra en toda Nafarroa, y los túneles de Belate constituyen uno de los puntos más problemáticos. Hace ahora un año, varios alcaldes y representantes municipales navarros y bomberos del parque de Oronoz-Mugaire denunciaron la falta de seguridad del túnel con un corte de carretera, y exigieron al Gobierno foral medidas urgentes que garanticen la seguridad de los miles de usuarios que diariamente transitan por estos túneles. Según los últimos datos, este vial registra el paso de 10.000 vehículos cada día, de los cuales 2.800 son pesados.

Además del proyecto previsto para los túneles, este año continuarán las obras para convertir esta carretera en una vía 2+1.

Las vías 2+1 son carreteras de doble sentido de circulación con tres carriles disponibles, de forma que el carril central se destina al adelantamiento, aunque dispone de una mediana infranqueable que impide el 100% de los adelantamientos con circulación en sentido contrario. Esta característica reduce significativamente el riesgo de colisión frontolateral, la causa más lesiva de la accidentalidad actual de la N-121-A.