El gobernador de la administración militar-civil de la región de Donetsk bajo control de las autoriddades de Kiev ha exhortado a la población a evacuar sin demora ante una tensa situación en la que las autoridades ucranianas temen una gran ofensiva rusa en todo el Donbass.

«Lo he dicho antes y me reitero: la población civil debe salir del lugar, daremos los detalles logísticos de estas evacuaciones, es un proceso gradual y no una agenda de la noche a la mañana (…). Pero la situación va para ponernse más difícil, eso está claro», ha señalado el gobernador, Pavlo Kyrylenko, desde Karmatorsk.

Capital regional de facto, desde octubre de 2014, del territorio aún bajo el control de Kiev en esta parte del país, Kramatorsk se encuentra en el centro de este caldero y podría verse rodeada.

No ha querido dar detalles sobre las evacuaciones en curso y se ha limitado a afirmar que hasta el domingo «146.000 personas ya habían abandonado la región». Casi 700.000 permanecen en el área controlada por Ucrania, ha agregado.

«Si el enemigo respetara las leyes de la guerra, la retórica sería diferente. Ahora queremos que se queden aquí la menor cantidad posible de civiles, hasta que la situación se estabilice», ha explicado.

Cuatro trenes diarios

En Kramatorsk, cientos de personas han acudido también este lunes a la estación para tomar un tren hacia el oeste de Ucrania. Durante los últimos días, estas evacuaciones, ordenadas y supervisadas por voluntarios, se han venido produciendo a razón de unos cuatro trenes diarios,  cerca de 2.000 personas.

Además, el gobernador ha recordado las matanzas de civiles al norte de Kiev donde cientos de personas fueron ejecutadas, y de las que Ucrania y sus aliados han acusado a Rusia cono «crímenes de guerra» . «Después de los hechos en Bucha podemos esperar todo del enemigo», ha advertido.

«No cederemos ni una pulgada de nuestro territorio sin luchar. Nuestras fuerzas están listas para enfrentar al enemigo y matarlo. Pero una vez más, es mucho más fácil luchar cuando los civiles han evacuado las ciudades», ha concluido.

El gobernador ha señalado que «la situación más difícil se refiere a Izium (una localidad recientemente conquistada por las tropas rusas en el borde de la región vecina de Jarkov) donde esperamos que la situación empeore».

«El enemigo está bombardeando por todas partes (...) Muchas localidades a lo largo de la línea de demarcación han sido destruidas por los bombardeos», ha añadido.

Desde que Rusia retiró sus tropas de la región de Kiev, movimiento que también ha hecho en Sumy, y anunció que quería «concentrar sus esfuerzos en la liberación de Donbass», el Gobierno ucraniano espera que la situación empeore a medida que las fuerzas rusas intentan flanquear al ejército ucraniano, que ha estado desplegado desde 2014 en una línea de frente que limita con Donetsk al sur y Lugansk al este, las capitales de los dos repúblicas separatistas prorrusas del mismo nombre- y que ahora llega hasta Izium, en el noroeste.