«Tenemos que poder mostrar al mundo lo que ha ocurrido aquí, lo que han hecho las fuerzas rusas. Haremos que los responsables sean castigados. Todos los días encontramos casos como éste, esto es un genocidio», ha indicado Volodímir Zelenski, dirigiéndose a la prensa internacional, en las calles de Bucha, ubicada en las proximidades de Kiev.

Las autoridades ucranianas han cifrado provisionalmente en 340 los cadáveres ya enterrados en esta ciudad que el Ejército ruso abandonó el 30 de marzo después de realizar ejecuciones sumarias, según Human Rights Watch.

Zelenski, que describió a los soldados rusos como «asesinos, verdugos y violadores», ha subrayado la importancia de «llevar a la justicia internacional» esta matanza, que ha salido a la luz después de que Moscú retirase sus tropas de la región de Kiev un mes después de iniciar la invasión de Ucrania.

Las imágenes divulgadas incluyen a cientos de cadáveres en las calles, algunos con las manos atadas a la espalda, ejecuciones que han sido confirmadas por algunos vecinos y testigos presenciales.

Listado con los nombres de los soldados rusos

Por su parte, la inteligencia militar ucraniana ha difundido en su página web los datos personales (nombres y apellidos, fecha de nacimiento y rango militar) de 1.600 soldados rusos integrados en las tropas que actuaron en Bucha.

La lista corresponde a los integrantes de la 64 Brigada Independiente Motorizada del Ejército ruso, que estaría implicada en la presunta matanza de civiles en esa ciudad.

«Así es como se verá a partir de ahora al Estado ruso (...) ¿Qué hizo el hombre que iba por la calle en bicicleta? ¿Para qué torturasteis hasta la muerte a civiles comunes y corrientes en una pacífica ciudad? (...) ¿Cómo se puede violar a mujeres y matarlas ante sus propios hijos? ¿Qué hizo a vuestra Rusia la ciudad ucraniana de Bucha?», preguntó Zelenski en una alocución televisiva.

Moscú lo niega «categóricamente»

Mientras tanto, el Kremlin ha rechazado «categóricamente todas las acusaciones» y ha pedido a los mandatarios occidentales que no se precipiten a la hora de realizar «acusaciones gratuitas». «Como mínimo, que escuchen nuestros argumentos», ha dicho el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, en su rueda de prensa diaria.

Más lejos ha ido el ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov, quien ha calificado la supuesta matanza de Bucha de «nuevo ataque con noticias falsas» contra Moscú, «montaje» supuestamente cometido justo después de que los soldados rusos abandonaran esa ciudad.

«Después de varios días se montó una escenificación que los representantes de Ucrania y sus patrocinadores occidentales muestran por todos los canales y las redes sociales», ha señalado.

El Consejo de Seguridad de la ONU se reunirá este martes

Lavrov considera que «dichas provocaciones son una amenaza para la paz y seguridad», por lo que Moscú ha solicitado una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU.

Gran Bretaña, que preside este mes el Consejo de Seguridad, ha rechazado la peticion rusa, mientras que Ucrania también ha pedido a la ONU que aborde las acusaciones de matanza de civiles.

En un mensaje a través de las redes sociales, la embajadora británica ante la ONU, Barbara Woodward, ha manifestado que Londres no va a permitir que Rusia «abuse» de su puesto en el Consejo de Seguridad para promover «sus mentiras y su propaganda». Pero ha puntualizado que la supuesta matanza de Bucha y el resto de «crecientes pruebas de crímenes de guerra» se discutirán en la sesión de este martes.

Al respecto, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha reclamado una «investigación independiente» que desemboque en una »rendición de cuentas efectiva».

Las negociaciones se mantienen

Al tiempo que denunciaba el «genocidio», Zelenski ha abogado por proseguir las negociaciones con Moscú y se ha mostrado convencido de que «en Ucrania habrá paz».

«No puede haber paz sin victoria. La victoria en el plano diplomático debe ir en paralelo con los pasos dados por nuestro Ejército. Por eso, debe haber uno u otro diálogo», ha dicho.

El  presidente ucraniano insiste en reunirse personalmente con su homologo ruso, Vladímir Putin, en Estambul con la mediación del mandatario turco, Recep Tayyip Erdogan.

Sobre este punto, Lavrov ha destacado que las negociaciones transcurren de manera intensiva, después de que, según ha dicho, Kiev mostrara una posición más realista sobre Crimea, el Donbás y su estatus no nuclear hace una semana en Estambul.

«La cumbre entre los presidentes de Rusia y Ucrania, y Putin lo ha dicho más de una vez, se celebrará tan pronto como haya resultados. Para reforzar ese resultado, una cumbre podría convocarse perfectamente», ha comentado el titular ruso de Exteriores.