La Seguridad Social ha reconocido el origen profesional del cáncer de pulmón que padece un soldador que trabajó como personal subcontratado en instalaciones de empresas como TESA o Fagor Electrodomésticos.

Según ha informado CCOO, la Dirección Provincial del Instituto Nacional de la Seguridad Social de Gipuzkoa ha emitido una resolución en la que atribuye la dolencia de este operario, de 60 años, a sus condiciones de trabajo.

La central ha indicado que Osalan ya advirtió de que el afectado ha estado expuesto a humos de soldadura y a partículas metálicas de óxidos de diversos metales. Y el informe elaborado por INSS recoge que la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer considera que existe suficiente evidencia para relacionar el cáncer de pulmón con la exposición a humos de soldadura.

CCOO informó el pasado mes de marzo del caso de otro trabajador al que se le había reconocido como enfermedad profesional la siderosis que padecía, y que se derivaba de la exposición a polvo de hierro en su actividad laboral.

En este sentido, ha recordado a los posibles trabajadores afectados que hay «enfermedades profesionales del aparato respiratorio más allá de las derivadas de la exposición al amianto y al polvo de sílice».