Surne Bilbao Basket apura sus opciones de play-offs este domingo a las 20.00 en la pista de Basket Zaragoza, uno de los rivales que peor se le dan al conjunto bilbaino, como bien recordaba Alex Mumbrú en su alocución del viernes.
«Zaragoza es una cancha que no se nos da bien últimamente. Hemos perdido y hemos perdido bien con diferentes entrenadores y diferentes jugadores», dijo el preparador badalonés, consciente además de que en la primera vuelta, en aquel primer partido disputado en Miribilla el pasado 23 de septiembre –por primera vez desde 2020 con un número limitado de aficionados en la grada– el cuadro maño le propinó una severa paliza: 76-100.
De hecho, la última victoria bilbina en la cancha maña data de la temporada 2016/17, un 69-75 preludio de dos victorias más de los hombres de negro en Miribilla y una serie ininterrumpida de cinco palizas con una desventaja mínima de 20 puntos para el cuadro bilbaino, y un 105-76 como la experiencia más reciente –el 13 de diciembre de 2020– en la pista aragonesa.
Los números son apabullantes y como que quitan las ganas de arrimarse al Príncipe Felipe. Pero lo cierto es que la situación de los hombres de negro de cara a la noche del domingo es bien distinta. En los últimos años, salvo en la campaña 2019/2020, Bilbao Basket ha estado en la parte baja de la tabla clasificatoria y las visitas a Zaragoza han sido bien urgencias clasificatorias o situaciones de pura depresión en la tabla.
Pero en este caso, Bilbao Basket apura unas remotas opciones de play-offs, después de haberse salvado de forma matemática hace un par de jornadas. Ya frente a Lenovo Tenerife se pudo ver al conjunto bilbaino liberado totalmente, sin la carga extra de la presión y, bajo el liderazgo de un Ángel Delgado pleno de inspiración, logró batir al cuadro aurinegro.
«Estamos con confianza y ganas de jugar, que es muy importante. Porque cuando te has salvado y tu objetivo prioritario está hecho, a veces puedes caer en la desidia pero hemos vuelto a coger la dinámica que teníamos y que se nos trastocó un poco con la salida de Val –Bigote–. Cuando un jugador importante se va tienes que volver a crear una estructura y tardamos unas semanas pero volvemos a estar con confianza y el equipo cuadriculado», declaraba Mumbrú en la previa.
Basket Zaragoza sí está metido en mitad del jaleo por la salvación. Se marchó Jaume Ponsarnau después de una temporada decepcionante del cuadro maño y hasta la llegada del ex de Manresa y Unicaja Frankie Ferrari, la situación clasificatoria maña ha estado pendiente de un hilo. En estos momentos, Basket Zaragoza suma 11 victorias, con dos triunfos sobre la zona de descenso. En el camino, la sensación de haber dejado de confiar en su cantera –claro que haber perdido a Jaime Pradilla y Carlos Alocén al poco de destacar tampoco ayuda– y de que salvar la temporada bastante premio puede ser para un equipo que de la mano de Porfi Fisac, jugó las semifinales de la campaña 2018/19.
Mirando al futuro
Luego queda la cuestión del futuro de Bilbao Basket. En la previas del viernes, Alex Mumbrú desvelaba que ni él ni ninguno de los miembros de la plantilla «tiene contrato» de cara a la próxima campaña. Quiso emplazar a los medios a que «esperar al final de la temporada para hablar» sin que esta cuestión «distraiga» al equipo en los tres partidos que le restan hasta el final de la Fase Regular de la Liga ACB.
Lo cierto es que varios jugadores se han revalorizado tras esta temporada 2021/22 –otro no tanto–, al tiempo que de igual forma que habrá equipos interesados en varios de los jugadores que han vestido la camiseta de Bilbao Basket, el propio equipo bilbaino tendrá entre sus ideas conformar un plantel adecuado a la próxima campaña, con la opción incluso de regresar a Europa, tras el ensayo no muy afortunado de la FIBA BCL de la temporada 2020/21.