NAIZ

Homenaje en Gesaltza a las víctimas del franquismo en la nueva Plaza de la República

Gesaltza ha homenajeado este domingo a dos vecinos de la localidad represaliados tras el levantamiento franquista, Jose Gartzia Sáez y Francisco Cruzado Fernández de Aranguiz. Una placa recuerda su memoria y con ella la del resto de represaliados, en la que ya es la Plaza de la República.

Aurresku ante la placa que recuerda a los dos vecinos de Gesaltza, durante el homenaje celebrado este domingo.
Aurresku ante la placa que recuerda a los dos vecinos de Gesaltza, durante el homenaje celebrado este domingo. (Endika PORTILLO | FOKU)

Un acto en Gesaltza ha recordado este domingo a las víctimas de la represión del franquismo, y se ha centrado especialmente en la memoria de dos vecinos de la localidad represaliados tras el alzamiento fascista: José María Gartzia Sáez, 'Rioja', y su cuñado Francisco Cruzado Fernández de Aranguiz.

Familiares de ambos han participado en el acto, al que también han asistido representantes de EH Bildu. Además de la ofrenda floral ante una placa que recuerda a ambos vecinos de Gesaltza, danzarais han ofrecido un aurresku en la que desde hoy es la Plaza de la República. Tal y como resaltó la asociación, el recuerdo de estos dos vecinos mantiene viva la memoria de todas aquellas personas de Añana que fueron represalias de una u otra forma durante la guerra provocada por el golpe de estado y la dictadura franquista.

Organizado por la asociación Ahaztuak 1936-1977, el homenaje se ha desarrollado en el centro del pueblo, en el lugar donde se alzaba la casa en la que vivió José María Gartzia y de la que fue arrancado junto a Francisco Cruzado.

Ambos fueron detenidos el 8 de agosto de 1936 y sometidos a un Consejo de Guerra por los golpistas. ‘Rioja’ fue enviado al fuerte de Ezkaba, en Iruñerria, donde seguía preso en las fechas en las que se produjo la conocida fuga del 22 de mayo de 1938, según explicó la asociación memorialista. Posteriormente fue conducido al campo de concentración existente en Urduña, donde siguió preso largo tiempo.

Cruzado nunca volvió a casa

Su cuñado, Francisco Cruzado, quedó en libertad sin ni siquiera haber pasado el Consejo de Guerra, pero no llegó a reencontrarse con sus familiares. «Todo apunta a que fue esperado por los fascistas y asesinado por ellos, siendo desde entonces uno más de los miles de desaparecidos que hasta hoy pueblan las cunetas de todo el estado español», denunció Ahaztuak, que precisó que la mayor parte del territorio alavés quedó de inmediato bajo control de los franquistas, por lo que no hubo frente de guerra ni enfrentamientos armados.

Bastaba que los franquistas intuyeran una ideología contraria a los sublevados para que esas personas fueran perseguidas y detenidas y muchas de ellas asesinadas.