Biniam Girmay (Intermarché) ha logrado la primera victoria de un ciclista de la África negra en una grande en la décima etapa del Giro entre Pescara y Jesi, de 196 kilómetros, tras imponerse en el sprint a Mathieu van der Poel (Alpecin). En la celebración ha recibido el impacto del corcho de la botella de champán que intentaba abrir en un ojo y ha tenido que ser trasladado a un centro hospitalario.
El corredor eritreo de 22 años ya hizo historia con su victoria en la Gent Wevelgem, primer clásica del World Tour para la África negra, y también se ha convertido en su primer representante en lograr un triunfo en una grande al tomarse la revancha de la etapa inicial, en la que Van der Poel le superó.
La jornada era propicia para la revancha porque el tramo final y el trabajo de sus equipos y los movimientos de los favoritos han impedido disputar la victoria a los sprinters y Girmay ha ganado por delante de Van der Poel, que le ha felicitado con deportividad tras ver que no podía remontarlo, Vincenzo Albanese (Eolo), Wilco Kelderman (Bora), Richard Carapaz (Ineos), Koen Bouwman (Jumbo), Romain Bardet (DSM), Pello Bilbao (Bahrain), octavo, Joao Almeida (UAE) y Mauro Schmid (Quick Step), que han ocupado las diez primeras posiciones.
Mikel Landa ha sido 19º en un grupo en el que han entrado los catorce primeros de la general y Juanpe López sigue líder con doce segundos de ventaja a Joao Almeida, 14 a Romain Bardet, 15 a Richard Carapaz, 20 a Jai Hindley, 28 a Guillaume Martin, 29 a Mikel Landa, séptimo, 54 a Domenico Pozzovivo, 1:09 a Emmanuel Buchmann y 1:22 a Pello Bilbao, décimo.
Gran trabajo de Alpecin e Intermarché
Un habitual de las fugas en este Giro, Mattia Bais (Drone Hopper), ha entrado en la escapada con Alessandro de Marchi (Israel) y Lawrence Naesen (Ag2r). Han alcanzado una máxima ventaja de 6:30, pero apenas han llegado con tres minutos al puerto de Recanati, de Cuarta, que se coronaba a 70 de meta sobre un pelotón en el que el Intermarché y el Alpecin han trabajado porque la segunda mitad de la etapa ha sido un constante sube y baja que ha dejado sin opciones a los sprinters puros como Ewan, Cavendish y Gaviria.
A 35 de meta ha atacado desde el pelotón Juul Jensen (Intermarché) y le han seguido dos corredores de Alpecin e Intermarché –De Bondt y Rotta–, que han atrapado a De Marchi, el más fuerte de la fuga, a 20 de meta. En la última subida de Cuarta de Monsano, 4,1 al 4,2%, que se coronaba a ocho de meta, han atacado Foss y Covi, pero Alpecin, Ineos e Intermarché han marcado un ritmo alto que les ha impedido marcharse y que ha descolgado a los sprinters que quedaban por delante.
En el descenso lo han intentado Nibali, Simon Yates, Van der Poel, Carapaz y Hugh Carthy, pero ninguno ha podido evitar el sprint de un grupo de una treintena de corredores.
La undécima etapa entre Santarcangelo di Romagna y Reggio Emilia, de 203 kilómetros llanos, ofrece una nueva opción para los sprinters puros.