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Lima

La culpa del deshielo de los glaciares peruanos se debate en un tribunal alemán

Saúl Luciano Lliuya, un campesino peruano, espera que su demanda contra el gigante energético alemán RWE salve su hogar en los Andes. Como parte del caso, jueces y expertos alemanes han visitado la laguna Palcacocha y los glaciares que la rodean para evaluar los efectos del cambio climático.

Saúl Luciano Lliuya observa el glaciar Palcaraju, en el Parque Nacional Huascarán, en el noreste de Perú.
Saúl Luciano Lliuya observa el glaciar Palcaraju, en el Parque Nacional Huascarán, en el noreste de Perú. (Luka GONZALES | AFP)

La visita de un grupo de peritos climáticos y magistrados alemanes a la zona cercana a la ciudad de Huaraz (este del Perú), que fue confirmada a AFP por un portavoz de la Alta Corte Regional de Hamm (Alemania), abre un nuevo capítulo en esta singular denuncia que busca sentar un precedente global.

El protagonista de esta demanda de «justicia climática» es Saúl Luciano Lliuya, campesino de 41 años que vive en la montaña, cerca de Huaraz, y acusa a RWE de ser en parte responsable del derretimiento de los glaciares por sus emisiones de gases de efecto invernadero.

El viaje de los expertos y jueces alemanes fue decidido por la Alta Corte Regional de Hamm, donde Lliuya apela su demanda contra RWE. En primera instancia, el caso fue desestimado por otro tribunal alemán en Essen.

Emisores individuales de procesos globales

Los expertos deben determinar el grado de riesgo que representa el deshielo de los glaciares para Huaraz, a ocho horas de automóvil al norte de Lima, y sus 120.000 habitantes.

Vista del glaciar Palcaraju, ubicado en el Parque Nacional Huascarán. (Luka GONZALES | AFP)

«Queremos que la empresa RWE se responsabilice por los daños medioambientales. En general han contaminado en todo el mundo, y con esta demanda estamos intentando algo», explica a AFP Lliuya, que también es guía turístico.

Similar posición tiene la abogada Roda Verheyen, de la ONG ambientalista Germanwatch, que le respalda en la demanda contra este grupo que opera en 27 países, incluidos Chile y Brasil.

Aunque RWE nunca se ha instalado en Perú, el campesino y la ONG alegan que el grupo alemán es uno de los mayores emisores de gases de efecto invernadero del planeta.

El portavoz de RWE, Guido Steffen, indicó a AFP que la demanda «fue rechazada en primera instancia por no tener bases legales y no cumplir con las leyes civiles alemanas». «Confiamos en que esto ocurrirá nuevamente con la apelación», añadió.

RWE sostiene que, «según las leyes, los emisores individuales no son responsables por procesos arraigados universalmente, y efectivamente globales, como el cambio climático».

Lliuya y Germanwatch contactaron en la Conferencia para el Cambio Climático de 2014 en Lima (COP20), tras la cual los activistas alemanes viajaron a Huaraz para discutir una eventual demanda en Alemania.

Derrumbes y sequía

Lliuya comenta que su mayor temor es que el deshielo de los glaciares provoque el desbordamiento de la laguna Palcacocha, un majestuoso cuerpo gélido de agua color azul turquesa ubicada a 4.650 metros de altitud, que podría afectar nuevamente a Huaraz, como ocurrió el siglo pasado.

Palcacocha está rodeada por las nieves perpetuas de los glaciares Palcaraju y Pucaranra, dentro del Parque Nacional Huascarán, que padecen el deshielo que alimenta el nivel de agua de la laguna.

«Como agricultor y como ciudadano no quiero que estos nevados desaparezcan, son importantes», dice Lliuya. También manifiesta sentirse «impotente» porque «sabes que estás en zona de riesgo y que hay empresas o industrias grandes que han causado esto».

Saúl Luciano Lliuya, con su hijo Brandon y su esposa, Lidia, en su hogar de la montaña andina, cerca de la ciudad de Huaraz. (Luka GONZALES | AFP)

Además de la casa que heredó de sus padres en Huaraz, Lliuya tiene una chacra (granja en quechua) de una media hectárea en las faldas de la montaña. Allí siembra maíz y cultivos tradicionales como quinoa, y tiene animales, incluidas gallinas y ovejas.

Es aquí donde vive con su esposa y dos hijos de forma humilde, con una cocina con pocos utensilios y un tronco de árbol ancho que hace de mesa de comedor como principal mobiliario.

Al miedo de un aluvión que sepulte su hogar se une el temor a una sequía de los acuíferos por el retroceso de los glaciares. Eso acabaría con la agricultura y el suministro de agua a Huaraz.

Batalla legal en Alemania

El caso contra RWE se remonta a 2015. La empresa ganó en primera instancia al año siguiente, pero Lliuya apeló y en noviembre de 2017 el Tribunal de Hamm admitió examinar su demanda.

La visita de los expertos a Perú, decidida por el tribunal en 2019, se postergó por la pandemia de covid-19.

Germanwatch y Lliuya piden que RWE pague por los costos de proteger la ciudad y la propiedad del campesino de una eventual inundación.

«Este caso se refiere a nuestras emisiones históricas de gases de invernadero, y siempre hemos operado nuestras plantas en cumplimiento con los límites gubernamentales, incluyendo nuestras emisiones de dióxido de carbono», replica RWE. La empresa tiene como meta ser emisor neutral de carbono para el año 2040.

Noah Walker-Crawford, investigador del cambio climático del University London College, junto a Saúl Luciano Lliuya en la laguna Palcacocha. (Luka GONZALES | AFP)

Deshielo y tragedia

En los últimos 50 años Perú perdió el 51% de sus glaciares, según informó la Autoridad Nacional del Agua en 2020.

El volumen de Palcacocha se redujo casi un 96% durante más de 30 años. «Pero luego, por el retroceso acelerado de los glaciares debido al calentamiento global, esta laguna creció muy rápido», añadió este organismo.

Alrededor de Palcacocha antes había hielo y nieve blanca; ahora solo hay tierra y grandes rocas.