Se esperaba una pugna cerrada entre la alianza Ensemble!, pilotada por Emmanuel Macron, y la Nueva Unión Popular Ecológica y Social (Nupes), que agrupa a gran parte de la izquierda gala y que partía con el reto de ser el grupo principal en la Asamblea Nacional gala y poder ejercer de contrapoder ante el Elíseo. Los primeros sondeos, recién cerradas las urnas, han puesto de manifiesto que las expectativas eran fundadas, y los datos reales lo han acabado de corroborar.
En unos comicios con una abstención récord, en torno al 52,5%, con el recuento al 96%, las dos fuerzas mantienen un empate técnico, con un 25,68% para Ensemble! y apenas medio punto menos para Nupes (25,15%), pero ha ido recortando distancias a medida que avanzaba el recuento y aún podría acercarse más, o incluso rebasar en la foto finish, a la candidatura de la mayoría presidencial.
Lo que está claro, en todo caso, es que todo queda muy apretado y con las espadas en alto para la segunda vuelta.
Jean-Luc Mélenchon no ha esperado a que finalice el recuento para avanzar, al calor de las proyecciones, que «es la primera vez que un presidente recién elegido no logra una mayoría en la Asamblea» –la mayoría está en 289 escaños–. Ha añadido que sus candidatos estarán en la segunda vuelta para el próximo domingo en unas 500 de las 577 circunscripciones. A su juicio, una mayoría de su partido en la Cámara Baja «es posible», aunque no lo auguran los sondeos.
En concreto, según las proyecciones Nupes obtendría entre 150 y 220 escaños, para pasar a ser la primera fuerza de la oposición, pero sin ostentar una mayoría parlamentaria.
Con todo, con la mirada en esa segunda vuelta, los sondeos también apuntan a que la Alianza de Macron no tiene garantizado renovar su mayoría absoluta en la Asamblea Nacional, que está en 289 escaños. El instituto Elabe le atribuye 270-310, por los 255-295 de Ipsos, los 180-210 de Ifop y los 260-300 de Harris.
Designarle primer ministro
Mélenchon, en cualquier caso, ha hecho un llamamiento a los electores para darle esa mayoría parlamentaria que obligue a Macron a designarle primer ministro y le permita aplicar sus políticas y no el «proyecto funesto» del presidente.
Por contra, la actual primera ministra francesa, Elisabeth Borne, ha agradecido el apoyo recibido en su circunscripción, Calvados, y ha hecho un llamamiento a combatir la histórica abstención de esta primera vuelta de las legislativas.
En lo que respecta a los resultados, Borne ha afirmado que no quiere «ceder» ante los extremos, en referencia a los buenos resultados obtenidos por Nupes. «Más allá de las etiquetas, son nuestros valores los que están en juego», ha asegurado, aunque ha insistido en que la coalición que apoya al presidente Macron, «es la única que puede lograr la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional».
Por su parte, la ultraderechista Agrupación Nacional (RN) ha quedado en tercer lugar, con entre el 19,1% y el conservador Los Republicanos (LR) se ha quedado con un 14,5% de los sufragios. Aunque, en término de escaños, y siempre según las proyecciones, este grupo quedaría en tercer lugar (entre 33 y 80 diputados), mientras que el RN se quedaría con entre 5 y 45 escaños.
En este contexto, la líder de la extrema derecha francesa, Marine Le Pen, ha pedido a los electores que en la segunda vuelta de las legislativas el día 19 se impida que Macron y los suyos obtengan la mayoría absoluta, pero que tampoco voten por la coalición de izquierdas liderada por Jean-Luc Mélenchon.
«Invito a los electores a no elegir entre los destructores de arriba y los destructores de abajo, a no elegir entre los que quieren privaros de vuestros derechos y los que quieren privaros de vuestros bienes», ha dicho Le Pen desde su feudo electoral de Hénin-Beaumont, donde tiene casi asegurada la reelección como diputada.
Por contra, el también ultraderechista Eric Zemmour no ha conseguido pasar a la segunda vuelta en la circunscripción de Var, donde, como candidato por el partido ¡Reconquista!, ha sido la tercera opción, con el 23,19%.