La Guardia Civil ha recuperado este sábado del río Bidasoa el cadáver de «un varón raza negra entre 20-25 años», presumiblemente un migrante que trataba de cruzar al Estado francés.

El hallazgo ha tenido lugar durante la mañana «a la altura del puerte internacional de Behobia», ha añadido este cuerpo, que indica que el estado del cadáver hace presumir que es un «fallecimiento reciente».

Agentes de la Guardia Civil han recorrido el río Bidasoa aguas arriba con motos de agua y patrullas de tierra para intentar localizar algún objeto que permita identificar al fallecido. El joven «apenas llevaba puestos un pantalón corto y un polo». Finalmente el cotejo de las huellas dactilares ha permitido saber que se trataba de Abderrman Bas, un guineano de 25 años de edad que había llegado a Arrecife (Lanzarote), el pasado 12 de mayo.

«Puede que Bas fuera uno de ellos»

Probablemente, Bas es uno de los jóvenes que ha estado estos días en la plaza de Irun con las voluntarias y voluntarios de la Red de Apoyo. «Pasa mucha gente y no lo sabemos. Lo que sí podemos afirmar es que ha vuelto a pasar. Llevamos mucho tiempo diciendo que los controles racistas son una barbaridad. Si seguimos así, continuaremos contando muertes», han indicado a NAIZ.

Tienen motivos para quejarse: «En los dispositivos de acogida solo les dejan dormir tres noches y salen con esa presión. Hoy mismo nos contaban que anoche pensaban intentar cruzar a las 22.00 pero que los guardias de seguridad no les dejaron salir del dispositivo. Eso es ilegal, son lugares de acogida».

«Con toda la presión que tienen, estando la muga como está, la gente intenta cruzar. Ayer veíamos a dos jóvenes muy nerviosos que estaban intentándolo sin éxito. Hacemos nuestras cábalas y puede que Bas fuera uno de ellos», comenta una voluntaria de la Red.

«Si tratan de cruzar siete veces al día, llegan a Hendaia y los devuelven una y otra vez, intentan tomar otra vía y es entonces cuando pasan estos dramas», añade.

Este domingo han llamado a concentrarse en la Plaza San Juan, a las 12.30.

El noveno desde abril de 2021, el segundo de este 2022

Se trata del noveno migrante que fallece ahogado en el Bidasoa desde abril de 2021. El último desapareció en el río el pasado 12 de marzo, pero su cuerpo no fue hallado hasta el 30 de ese mismo mes. Además, otros tres perdieron la vida el pasado octubre tras cruzar el río, arrollados por un tren cuando caminaban por la vía en Ziburu.

El delegado del Gobierno español en la CAV, Denis Itxaso, ha lamentado «un nuevo drama humano en el Bidasoa», donde «personas migrantes que buscan un hogar, un lugar donde desarrollar una vida, se topan con la muerte en una frontera en el seno de Europa». Ha asegurado que el Ejecutivo de Madrid aspira a «flujos migratorios seguros, legales y ordenados».

Santano: «Replantearse los controles»

El alcalde de Irun, José Antonio Santano, ha considerado necesario «replantearse los controles en la frontera», tras la muerte de otro migrante en aguas del Bidasoa.

En un comunicado, Santano ha mostrado su pesar por el fallecimiento y ha advertido de que «no podemos acostumbrarnos a esta situación y al drama que provoca. No podemos seguir viviendo este goteo de pérdida de vidas jóvenes en el río Bidasoa. Ellos saltan al agua para evitar los férreos controles fronterizos. Si ese es el problema tenemos que solucionarlo».

Por ello, ha insistido en la necesidad de que desde el Gobierno francés se entienda la necesidad de «establecer en Europa unas políticas migratorias comunes para todos los países de la Unión que eviten esta situación».

El Ayuntamiento de Hondarribia también ha hecho público un comunicado en el que lamenta este «dramático suceso» que a su juicio «requiere de la apertura de corredores humanitarios seguros para las personas migrantes. La cooperación y coordinación entre las instituciones es, si cabe, más importante que nunca», ha indicado. 

Control «selectivo y racista» de la Policía francesa

El director de Migración y Asilo del Gobierno de Lakua, Xabier Legarreta, ha lamentado que el fenómeno migratorio en tránsito vuelva a mostrar «su cara más dura y dramática». A su juicio, el control «selectivo y racista» que ejerce la Policía francesa en Irun hace que estas personas «se vean obligadas a utilizar rutas menos seguras para conseguir su objetivo, provocando en algunos casos situaciones dramáticas como la vivida esta mañana».

«Desde el Gobierno Vasco, una vez más, exigimos rutas y corredores seguros. Los corredores humanitarios son más necesarios que nunca», ha añadido Legarreta.

«Una situación injusta»

El diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, exige también la apertura de «corredores seguros» para el tránsito migratorio. «Se trata de un nuevo fallecimiento provocado por una situación injusta. Sea en el Mediterráneo, sea en el Bidasoa, sea en cualquier punto de Europa, nadie debería afrontar situaciones tan injustas y extremas en la búsqueda de una vida digna», ha indicado.

«Gipuzkoa es un territorio enormemente solidario, acogedor, que condena las injusticias y que dice no a cualquier vulneración de derechos humanos. No podemos y no queremos acostumbrarnos a estos fallecimientos. A lo largo de la historia, el río Bidasoa ha sido testigo de muchas situaciones dramáticas, de mucho dolor e injusticia humana, no podemos permitir que se repita esta realidad», ha subrayado.

Manifestación en Donostia

SOS Racismo, por su parte, ha denunciado los controles fronterizos que «son responsables de estas muertes en el Bidasoa». Y ha demandado al Gobierno de Lakua que, en el marco de la Eurorregión Nueva Aquitania-Euskadi-Navarra, exija al Gobierno francés que surja de las elecciones de este domingo el cese de estos controles.

Además, ha llamado a la ciudadanía a expresar su rechazo a estas políticas acudiendo a la manifestación que, en el marco del Día Mundial de las Personas Refugiadas, partirá, este domingo 19, a las 12.00 desde el Aquarium de Donostia.