Cuando se daba por hecho que el ala-pívot de 18 años Jabari Smith jr iba a ser el número uno del draft de la NBA 2022, el ala-pívot italo-americano Paolo Banchero le ganó por la mano en el sprint final.

Tanto Banchero como Smith han «gastado» solo una temporada en la NCAA y esa política del «one and done» les ha valido para dar el salto a la NBA, a unos Orlando Magic que precisan reconstruir su franquicia tras firmar el segundo peor resultado la campaña 2021/22, con un récord de 22-60, solo por detrás de los Houston Rockets, que fueron quienes, en tercera posición, eligieron a Jabari Smith jr.

Hace ya años que el orden de elección en el draft de la NBA no se realiza de forma pura en orden inverso a la clasificación de la campaña, ya que esa regla permitía la trampa del «tanking», una forma muy específica de definir a franquicias que tiran por la borda campañas enteras sin que les importe sumar derrota tras derrota, ya que su idea es reconstruir su plantel a través del draft y los traspasos.

Por tanto, las franquicias con los cinco peores resultados sortean quién será el primero en elegir y los Magic fueron los agraciados, que optaron por el ala-pívot de la Universidad de Duke.

En ese sentido, Banchero llegó al Brclauys Center de Nueva York con el aval de todo un «Coach K», Mike Krzyzewski, que emitió un vídeo en el que felicitaba a su jugador, emocionado y sorprendido a la par que reluciente con su traje morado, y al que definía como «el jugador más especial que he entrenado nunca».

«No sé qué decir. No puedo creer lo que acaba de suceder, honestamente (...). Esto es increíble. No puedo hablar», dijo el ala-pívot que, acompañado por sus padres, se quedó sin habla cuando escuchó su nombre.

No son los «Blue Devils» de duke la franquicia con más suerte cuando destacan en el draft, en todo caso, aunque se convirtió en la que más números uno del draft tiene al unir el nombre de Banchero a los de Elton Brand (1999), Kyrie Irving (2011) y Zion Williamson (2019).

Lágrimas de felicidad

No hubo grandes sorpresas en la noche y tampoco estrambóticos traspasos, aunque hubo unos cuantos, como sucede en cada noche del draft.

Chet Holmgren, con sus 2,13 metros de altura, 2,25 metros de envergadura y escasos 95 kilos –aunque hay quien dice que no llega ni a 90– fue el elegido en segunda plaza por los Oklahima City Thunder, una franquicia que está apostando por el talento joven pero que nadie sabe por dónde va a salir después de no conseguir el anillo cuando tuvo durante años una plantilla que a día de hoy, por muchas razones, sobre todo económicas, sería irrepetible con Durant, Westbrook, Harden e Ibaka.

Jabari Smith, acompañado por su padre –jugador de la NBA a principios de siglo– acabará en Houston mientras que el Top 5 lo completaron Keegan Murray (Iowa), que jugará para los Sacramento Kings; y Jaden Ivey (Purdue), que defenderá los colores de los Detroit Pistons.

Este último protagonizó uno de los momentos más tiernos y emotivos de la noche. Incapaz de controlar sus emociones, lloró como un niño en brazos de su madre, Niele Ivey, exjugadora de Mann Filter Zaragoza –donde el pequeño Jaden cumplió los tres años a orillas del Ebro– y más tarde jugadora de la WNBA en Indiana, Phoenix y Detroit, para después saltar a los banquillos primero como entrenadora asistente de los Memphis Grizzlies y ahora entrenadora jefe del equipo universitario femenino de Notre Dame.

Entre los diez primeros aparecieron también Bennedict Mathurin (Indiana Pacers, sexta posición), Shaedon Sharpe (Portland Trail Blazers, séptima), Dyson Daniels (New Orleans Pelicans, octava), Jeremy Sochan (San Antonio Spurs, novena) y Johnny Davis (Washington Wizards, décima).

El primer movimiento de la noche lo protagonizaron los New York Knicks, que escogieron al francés Ousmane Dieng en el undécimo puesto pero que lo traspasaron automáticamente a los Oklahoma City Thunder.

Oklahoma City se quedó así con tres jugadores entre los doce primeros puestos de este draft: Chet Holmgren (dos), Ousmane Dieng (once) y Jalen Williams (doce).

Sin presencia del Baskonia

Los pocos jugadores con procedencia ACB salieron en la segunda ronda. Lastimosamente, el ruso del Baskonia Pavel Savkov, a pesar de haber dejado muy buena impresión en los «workouts» –entrenamientos privados con las franquicias en las que se evalúan no solo las características técnicas y físicas de los jugadores, sino también su personalidad, un aspecto cada vez más importante para las franquicias–, no halló acomodo entre los 60 primeros a pesar de que algunas quinielas especularan con un posible interés de los Warriors.

Veremos qué le depara el futuro al ruso que se ha pasado las dos últimas campañas cedido en Iraurgi, pero si le sirve de consuelo, habrá que aclarar que dos exbaskonsitas con meritoria carrera en la NBA como José Manuel Calderón y Andrés Nocioni tampoco fueron elegidos en su correspondiente draft de la NBA.

Entre los jugadores ACB, el senegalés Khalifa Diop (Gran Canaria) fue elegido en mejor posición: en el puesto 39 por los Cleveland Cavaliers, el italiano Matteo Spagnolo (Real Madrid, cedido a la LEGA italiana) fue escogido en la posición 50 por los Minnesota Timberwolves y el congoleño Yannick Nzosa (Unicaja Málaga) fue seleccionado en el lugar 54 por los Washington Wizards.

La noche dejó algunas anécdotas como, aparte de los pitos al Comisionado Adam Silver, la presencia en el draft del cineasta Spike Lee, un apasionado del baloncesto y de los New York Knicks, y del futbolista francés Kylian Mbappé.