La dirección de Mercedes Benz Gasteiz ha trasladado al comité de empresa una nueva propuesta en la que se incluyen algunas mejoras económicas y de gestión de flexibilidad. En concreto, plantea una subida salarial del 5% este año y del 2% de 2023 a 2026, además de una nueva paga extra de 750 euros a cobrar anualmente cada mes de setiembre desde este mismo ejercicio.
En el capítulo de flexibilidad, la jornada anual se mantendría en 214 días y habría una nueva regulación de turnos en fin de semana que obligaría a la empresa a avisar diez días antes de que empiece el mes anterior, que solo se podría alterar «en unas pocas excepciones».
Al parecer, la dirección está dispuesta a contratar a un equipo nuevo para trabajar sábados, domingos y festivos para fabricar más de 190.000 furgonetas al año. Este equipo supondría el 80% del turno. El 20% restante lo formarían voluntarios de la plantilla, que recibirían un plus de 4.500 euros al año y una reducción de jornada de 200 horas.
La oferta de la dirección ha llevado a los sindicatos CCOO, UGT, Ekintza y PIM a «aplazar» la jornada de huelga prevista para este miércoles, mientras que ELA, LAB y ESK la mantienen, al igual que las de los días 7 y 8, al considerar que los avances son «muy pequeños» e «insuficientes».
En un escueto comunicado, ELA ha advertido de que la dirección «sigue sin garantizar el poder adquisitivo de la plantilla, ya que la subidas salariales propuestas por la dirección están muy por debajo del IPC actual».
«Asimismo, mantiene la sexta noche y su apuesta por la flexibilidad. No regula las condiciones del colectivo que trabaja en fines de semana y festivos; y hace caso omiso a las reivindicaciones acerca del Modelo V y la movilidad», ha añadido, incidiendo en que «todas ellas son reivindicaciones que en la última asamblea fueron defendidas por la plantilla. Razón por la que, aunque una mayoría del Comité compuesta por UGT, CCOO, Ekintza y PIM ha decidido desconvocar la jornada de huelga del 6 de julio, desde ELA, LAB y ESK mantenemos la convocatoria, como se decidió en Asamblea».
En el mismo sentido, fuentes de LAB han explicado a Europa Press que los avances se dan en relación al contrato de relevo –la dirección se compromete a que haya 250 contratos relevo durante toda la duración del convenio– pero «en los demás no hay nada».
Por ello, han decidido mantener las huelgas previstas para el 6, 7 y 8 de julio. Este miércoles, a las 10.30 horas, arrancará una manifestación en la Portería Sur de la fábrica, y se realizará una asamblea para los trabajadores y trabajadoras de Mercedes para informar con más detalles de lo planteado por la dirección.
Reunión en Stuttgart
El paro de este miércoles coincidirá con la reunión prevista en Stuttgart entre el lehendakari, Iñigo Urkullu, y los directivos de la multinacional alemana, ante quienes defenderá que la planta de Gasteiz es un «entorno atractivo» para que lleve a cabo una inversión de 1.200 millones de euros.
Así lo ha explicado el portavoz del Ejecutivo autonómico, Bingen Zupiria, que ha incidido en que la reunión «nada tiene que ver con el conflicto laboral» que se vive en la factoría, que se ha visto obligada a paralizar la producción en tres ocasiones durante las últimas semanas a consecuencia de unos paros que, según los sindicatos, han sido secundados por el 95% de los trabajadores y trabajadoras de producción.