La Policía Municipal de Iruñea detuvo este jueves al presunto autor de una agresión sexual cometida el pasado 4 de junio en Arrotxapea y ha puesto este viernes al arrestado a disposición del juez de guardia, que ha decretado su ingreso en prisión provisional.
En el auto de ingreso en prisión, el titular del juzgado de instrucción número 5 señala que en este caso procede acordar la prisión del investigado por la presunta comisión de un delito de agresión sexual castigado con una pena de 6 a 12 años de cárcel.
El juez considera que existen indicios de la comisión del delito de las declaraciones en sede policial y judicial de la denunciante, quien ha expuesto de forma detallada cómo ocurrieron los hechos, «su negativa y petición de auxilio así como la resistencia que opuso y la fuerza utilizada por el denunciado, que la arrojó al suelo, la sujetó con fuerza e incluso le agarró del cuello» para cometer la agresión sexual.
Acuerda por ello la prisión provisional atendiendo a la gravedad del delito que se imputa y de las penas a imponer. Además, indica que el denunciado es extranjero, está en situación irregular y no tiene ningún arraigo en el Estado.
Asimismo, afirma que procede acordar la medida para la protección de la víctima ante la gravedad de los hechos cometidos y también se cumple el requisito de haber sido solicitada la prisión por el Ministerio fiscal y la acusación particular, «sin que las medidas propuestas por la defensa garanticen en la misma forma la presencia del investigado a disposición judicial».
En libertad el arrestado en Portugalete
Por otro lado, el juez instructor ha dejado en libertad, con la medida cautelar de no acercarse a menos de 500 metros de su pareja, al hombre de 44 años detenido en Portugalete tras provocar, de forma presuntamente intencionada, que su pareja se precipitara desde su vivienda en esta localidad vizcaina.
Según han informado fuentes del Departamento de Seguridad, el detenido ha sido puesto este viernes a disposición del Juzgado de Violencia contra la Mujer de Barakaldo, donde se ha acordado su puesta en libertad con la citada medida cautelar.
La Ertzaintza le había acusado de homicidio en grado de tentativa y la mujer sufrió diversas fracturas por la caída.