El Golfo de Bizkaia es un «callejón sin salida» para los microplásticos, según concluye un estudio del centro tecnológico Azti. Los resultados de la investigación han sido dados a conocer a través de una nota en la que recuerda que los plásticos están considerados como «una de las principales amenazas para los océanos», ya que se calcula que diez millones de toneladas de residuos de este tipo van a parar al mar cada año.
En el caso concreto de Euskal Herria, el centro tecnológico recuerda que las pocas investigaciones existentes sobre la abundancia de plásticos en las aguas del Golfo de Bizkaia «se centran principalmente en mar abierto, mientras que la información sobre la zona costera es aún limitada».
Para llenar este vacío, Azti «ha liderado durante cuatro años una investigación cuya misión ha sido definir la distribución espacial de las basuras marinas del Golfo de Bizkaia, incidiendo en ámbitos como el análisis de microplásticos, el estudio de los entornos fluviales, los residuos flotantes, la producción de residuos por sectores, los procesos de biodegradación y la acuicultura y la pesca».
Gran acumulación de microplásticos
Los resultados obtenidos por el equipo científico de Azti arrojan que la zona oceanográfica del Golfo de Bizkaia es «un ‘callejón sin salida’ para los microplásticos». En concreto, los microplásticos (partículas menores de 5 mm) representan el 93% de la cantidad de plástico presente en las muestras analizadas (28% en peso); los mesoplásticos (entre 5 mm y 25 mm), el 7% (26%) y los macroplásticos (de más de 25 mm), el 1% (46%).
La abundancia media de plástico encontrado ha sido de entre 739.395 y 2.625.271 de piezas de plástico por km2 (equivalente a 998 y 4.338 gramos por km2) y una media de 232.227 elementos por km2.
Además, los datos concluyen que las aguas de Euskal Herria al norte de los Pirineos presentan una mayor cantidad de plásticos, con una abundancia cinco veces mayor que la de las costas al sur de la cordillera.
«Este estudio demuestra que el sudeste del Golfo de Bizkaia es un punto caliente de plástico con niveles en las aguas costeras similares a los del Mar Mediterráneo u otras zonas de agregación de basura», concluye Oihane Cabezas, experta en basuras marinas de AZTI.
Implicación del sector pesquero
El estudio ha contado con la colaboración de los barcos pesqueros Miren Argia e Itsas Belhara para la realización de las campañas de recogida de muestras en las aguas costeras.
La investigación ha estado liderada por personal científico de Azti y ha contado también con la colaboración de especialistas del Instituto Universitario de Investigación Marina (INMAR) de Cádiz y de la Universidad de Siena.
El proyecto ha estado parcialmente financiado por los proyectos europeos Life Lema y Jericó S3 del programa de investigación e innovación Horizon 2020, y cofinanciado por el Gobierno de Lakua.