Funcionarios de prisiones han requisado 570 gramos de hachís, 20 de heroína y trece teléfonos móviles en Zaballa.
Según ha informado ‘El Correo’, parte de la droga estaba oculta en la biblioteca del módulo 5, donde se hallaron 70 gramos de hachís, 25 de marihuana, cuatro de heroína, siete teléfonos móviles, cuatro
cargadores y una báscula.
El presunto responsable de introducir la droga en la cárcel es un preso que dispone de autorización para salir de las instalaciones. Se encarga de limpiar y adecentar los exteriores.
En un cacheo le incautaron medio kilo de hachís, cuatro gramos de marihuana, trece papalinas de una sustancia que podría ser heroína, y media docena de teléfonos, así como tres cargadores.
La consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, ha señalado que la operación de los funcionario «redunda en nuestro objetivo de disponer del mejor entorno posible para lograr la resocialización de las personas presas».
Ello redunda en nuestro objetivo de disponer del mejor entorno posible para lograr la resocialización de las personas presas.
— Beatriz Artolazabal (@B_Artolazabal) October 30, 2022
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