Ramon Sola
Aktualitateko erredaktore burua / Redactor jefe de actualidad

El PNV toma nota de que es percibido como partido «conservador» y con «imagen de amiguismo»

El PNV ha dado por concluido el proceso ‘Entzunez eraiki’ en el que ha buscado obtener la fotografía «sin Photoshop» que tienen sobre el partido la ciudadanía en general y sectores cualificados. Plantea diez compromisos para mejorarlo, con el ciclo electoral como horizonte.

Andoni Ortuzar, en el acto de presentación de las conclusiones de este proceso.
Andoni Ortuzar, en el acto de presentación de las conclusiones de este proceso. (Monika del Valle | Foku)

El PNV ha presentado en un acto en el Palacio Euskalduna de Bilbo en la noche de este lunes los resultados de su proceso ‘Entzunez eraiki’, en el que ha testado cómo lo ve la ciudadanía vasca mediante 250 entrevistas y reuniones. El proceso de «escucha activa» ha tenido como objetivo expreso mejorar su conexión con la sociedad para el ciclo electoral en ciernes, y en él destaca la asunción por parte del PNV de que es percibido como un partido «conservador» y con problemas derivados del clientelismo.

El apartado más revelador de las 64 páginas de documento-resumen es el titulado ‘Ambitos de mejora’ en la parte económica, que comienza así: «Se aprecian dificultades para que el mensaje de EAJ-PNV cale en una parte de la ciudadanía, que nos percibe como un partido conservador y no nos atribuye un carácter de partido moderno y comprometido en lo social».

«No es un partido asociado a la corrupción, pero debe contrarrestar cierta imagen de ‘amiguismo’ que ha podido calar tras tantos años de gestión pública», continúa este apartado.

En los contactos con las llamadas «personas expertas» han aflorado críticas al PNV como que «se echa en falta mayor concreción en las políticas vinculadas a energía, movilidad y sostenibilidad. Se hace hincapié en la complejidad administrativa y la burocracia como elementos que tienden a mermar la efectividad de la acción política y el desarrollo de proyectos. Las políticas públicas tienden a percibirse muy dependientes y condicionadas por los diferentes procesos electorales. Además, se puede caer en ‘síntomas de inmovilismo’ y no asunción de riesgos desde la política».

En el espacio de la «gobernanza», el PNV detecta que se imputa «cierta autocomplacencia» a las instituciones que rige. Y además, «se nos atribuye una gobernanza tradicional y jerárquica en comparación con otras formaciones políticas. Se percibe la necesidad de una mayor apertura a nuevas estructuras, dinámicas y colectivos sociales».

En el capítulo de «sostenibilidad» se acusa recibo de que «el referente aspiracional debe ser Europa. Se critica el excesivo recurso a la ‘competitividad’ en sus políticas ambientales [del PNV], lo que se puede relacionar en parte con el ‘capitalismo agresivo’».

«En lo que respecta a la igualdad de género, se percibe que en los puestos de máxima relevancia es mayoritario el peso masculino», constata este informe, publicado poco después de que se haya optado por dos mujeres (Eider Mendoza y Elixabete Etxanobe) para aspirar a las diputaciones de Gipuzkoa y Bizkaia, tras una legislatura en que los siete principales dirigentes institucionales del PNV han sido hombres.

Especialmente crítica es la valoración entre la juventud: «El PNV se personifica como un ‘hombre mayor’» y «un partido alejado de las clases bajas»

La percepción crítica es aún más acentuada en el capítulo de «juventud»: «El partido transmite en ocasiones una imagen pasada de moda, ‘mayor’ o antigua. En ocasiones, EAJ-PNV se personifica como un ‘hombre mayor’. Apenas se conocen líderes jóvenes de EAJ-PNV. No se identifican figuras con especial carisma, especialmente entre la población joven. Se percibe como poco diverso y plural. Se identifica como un partido de corte conservador, alejado de las clases más bajas (...) Estos ‘clichés’ se utilizan para indicar que a una persona joven le resulta difícil reconocer públicamente que va a votar a EAJ-PNV, aunque pudiera hacerlo».

La gestión de la pandemia ha acentuado esta sensación: «Se relaciona a EAJ-PNV con la limitación de las libertades, por comparación con otras comunidades». Y además «se percibe cierto conformismo en la gestión: ‘Que estemos bien no quiere decir que todo esté bien’».

Obviamente en este extenso análisis se han recogido también lo que se denomina como «fortalezas», aunque aparecen esbozadas de modo más simple. El propio presidente del EBB, Andoni Ortuzar, ha preferido en su intervención de este lunes destacan los déficits para intentar corregirlos en una aplicación desde ya: «Esta es la foto que nos ha sacado la sociedad vasca, sin retoques ni Photoshop. Hay que comprometerse a cambiar lo que haya que cambiar y mejorar para que la foto próxima se ajuste más a lo que la sociedad espera de nosotros y nosotras».

«Fortalecer el vínculo emocional»

Llama la atención que entre estos capítulos y otros como migración o euskara no figure un análisis detallado sobre la posición del PNV ante el estatus político de Euskal Herria. Al parecer esta no ha sido una de las cuestiones abordadas de modo específico en el proceso de escucha. Dicho de otro modo, quien acuda al informe para intentar descifrar si el PNV actual es criticado por su tibieza ante el derecho a decidir o la independencia no encontrará nada al respecto.

El proceso no ha incidido en si el PNV actual es criticado por su posición ante el derecho a decidir o la independencia. Se salda con una conclusión genérica y ambigua

En las conclusiones esta cuestión se salda con algunas reflexiones ambiguas: «La sociedad vasca está cambiando. Es más diversa. Nuestro gran reto es, precisamente, lograr fortalecer la comunidad política desde la diversidad y la pluralidad. Cuidar la especificidad y la realidad diferencial, sí, pero regarla con la diversidad global que ya condiciona el mundo».

«Tenemos una enorme tarea por delante: lograr una mayor identificación de la ciudadanía que vive en los territorios vascos con Euskadi y con el proyecto de construcción nacional desde una visión más integral; fortalecer el vínculo emocional con el proyecto nacional de Euskadi para el futuro. En el proceso de escucha activa hemos podido constatar que el liderazgo de EAJ-PNV aparece más asociado a la gestión de las políticas públicas y a la labor desarrollada desde las instituciones. Nuestro objetivo es construir un relato de futuro que logre una adhesión con nuestro proyecto nacional, que combine la causa del pueblo vasco con la capacidad de respuesta a las transformaciones globales», añade.

Los otros nueve compromisos

Los otros nueve compromisos verbalizados en el Euskalduna ante más de 500 representantes del ámbito social, cultural y económico vasco se resumen bajo los epígrafes: «Profundización y fortalecimiento democrático», «Activar la vida interna de EAJ-PNV», «Intensificar la relación con la sociedad organizada y el tejido asociativo», «El euskara, alma vasca», «La generación de la igualdad de género, la solidaridad, la diversidad y la colaboración», «Modelo propio de desarrollo económico, empleo de calidad y servicios públicos», «Agenda 2030 como marco para las políticas públicas», «Nafarroa e Iparralde» y «EAJ-PNV en el mundo».

En el detalle de los mismos destacan afirmaciones como «seguiremos fortaleciendo los servicios esenciales de salud, educación y protección social» o «buscaremos una mayor ‘navarridad’ en las señas de identidad de EAJ-PNV».