Andrew Tate es lo que se viene llamando un ‘influencer’, persona con centenares de miles de seguidores en redes sociales cuya opinión marca tendencias. Este antiguo luchador de kickboxing fue expulsado de Twitter en 2017 después de lanzar mensajes misóginos culpando de las agresiones sexuales a las víctimas, pero regresó hace poco, con el advenimiento de Elon Musk a la red de pajarito azul.
En su necesidad de llamar la atención para mantenerse en el candelero, este ultraderechista nacido en EEUU envió el pasado martes un mensaje a la activista medioambiental Greta Thunberg jactándose de tener 33 coches y afirmando que le mandaría una lista completa con las respectivas emisiones de gases de cada uno de ellos.
«Hola Greta Thunberg. Tengo 33 coches. Mi Bugatti tiene un quad turbo W16 8.0L. Mis dos Ferrari 812 tienen 6.5L v12s . Esto es solo el principio. Por favor dame tu dirección de correo electrónico para que pueda enviarte una lista completa de mi colección de automóviles y sus respectivas emisiones», esgrime el tuit, al que se ha atribuido también un trasfondo publicitario.
Lo que igual no se esperaba era la contundente réplica de Thunberg, que además se hizo viral. «Sí, por favor ilumíname. Envíame un correo a energíadepenepequeño@comprateunavida.com», respondió la joven sueca, que la próxima semana cumple 20 años.
yes, please do enlighten me. email me at smalldickenergy@getalife.com https://t.co/V8geeVvEvg
— Greta Thunberg (@GretaThunberg) December 28, 2022
La alusión al tamaño de sus genitales debió afectar al orgullo de Tate, que subió un vídeo fumándose un puro y pidiendo una pizza. «Liberando gases de efecto invernadero. De hecho, estoy enfadado con Greta. Por favor, tráeme pizza (le dice a una persona que no aparece en el vídeo), pero asegúrate de que el cartón no haya sido reciclado», apunta.
Thank you for confirming via your email address that you have a small penis @GretaThunberg
— Andrew Tate (@Cobratate) December 28, 2022
The world was curious.
And I do agree you should get a life ❤️ https://t.co/mHmiKHjDGH pic.twitter.com/SMisajQRcf
La caja de pizza era de la cadena rumana Jerry's Pizza, y con esa pista, en un inesperado giro de guion, Andrew Tate fue detenido ayer por la tarde en ese país europeo junto a su hermano Tristan.
Explotación sexual
La Fiscalía les acusa de haber constituido un grupo delictivo organizado con el que reclutaban, alojaban y obligaban a mujeres a crear materiales con contenido pornográfico para su posterior distribución. Dicha organización engañaba a mujeres en Estados Unidos y Reino Unido para llevarlas a Rumania, fingiendo una reciprocidad amorosa y prometiendo una relación de matrimonio.
Posteriormente, las víctimas eran transportadas y alojadas en edificios en el condado rumano de Ilfov, donde, después de presuntamente sufrir actos de violencia física y coerción mental, fueron explotadas sexualmente por miembros del grupo, obligándolas a realizar demostraciones pornográficas para su posterior difusión en redes sociales. Una de las víctimas fue obligada en dos ocasiones diferentes por un sospechoso a tener relaciones sexuales.
Con estas actividades, Andrew y Tristan habrían obtenido importantes sumas de dinero con las que habrían comprado casas, coches de lujo –como los que presumía de tener en su primer mensaje a Thunberg– y criptomonedas.
La joven no ha dejado pasar la ocasión de regodearse por la caída del icono machista. «Esto es lo que pasa cuando no reciclas tus cajas de pizza», ha escrito en Twitter. Como se dice últimamente, tremendo zasca.
this is what happens when you don’t recycle your pizza boxes
— Greta Thunberg (@GretaThunberg) December 30, 2022