Azora ha comprado al Grupo Amenabar la concesión para la explotación de la estación de autobuses de Bilbao Intermodal, conocida como Termibus, según se ha conocido este lunes. Se trata de una concesión hasta el año 2057 para la gestión de los autobuses interurbanos con origen o destino en la ciudad de Bilbo, la explotación de un parking subterráneo de 526 plazas, así como de una zona comercial de 850 m2 anexa a la estación.

Según ha informado la compañía, la estación, cuya construcción finalizó en octubre de 2019, está ubicada en una zona de alto tráfico y forma parte del intercambiador de San Mamés, donde confluyen los servicios de Renfe Cercanías, el metro de Bilbo y el tranvía de la ciudad.

Esta adquisición es presentada como parte de la estrategia de Azora de invertir en activos reales de «alto potencial de desarrollo» que contribuyan a la sostenibilidad y se suma a la adquisición del 51% de la estación de autobuses de Donostia completada el pasado mes de julio.

Ambas estaciones se han adquirido desde la sociedad Infrabask II domiciliada en Bilbo y creada por Azora para abordar inversiones en infraestructuras sostenibles.

«Fondo buitre» en Donostia

El Grupo Azora es de sobras conocido en Donostia, merced a una política de adquisición de viviendas que está dejando en la calle a un buen número de vecinos que no pueden pagar los nuevos alquileres que les exigen. Se acusa a este fondo buitre que aterrizó en Euskal Herria a principios de 2020 de querer especular con la vivienda. 

De hecho, tal es la magnitud de los problemas con los pisos propiedad de Azora que los arrendatarios se han organizado como Asociación Vecinal en torno al grupo Inquilinos Azora.