En su momento no fue más que una ocurrencia publicitaria pero ha acabado calando y al tercer lunes de enero le va a resultar difícil sacudirse la fama de día más deprimente del año. El de 2023 lo ha sido en Zubieta, donde a la resaca copera se le ha unido el disgusto por la derrota de Valencia, que deja a la Real definitivamente apeada de la pelea europea, por mucho que las matemáticas ofrezcan aún argumentos a los más optimistas. La confirmación de que las emociones de la temporada pasada no se repetirán en mayo y que en los próximos meses habrá que motivarse sólo con el mucho más insulso «acabar lo más arriba posible» no ayuda a levantarse de la cama y tampoco el tiempo ha estado hoy muy por la labor, así que el día realista ha perdido hoy el blanco para quedarse sólo en «blue monday».

Por suerte, y precisamente por la gran temporada que firmó hace un año la Real, al día se le han podido arañar unas cuantas horas para acabar tornando el gesto sombrío en una, aunque todavía algo tímida, sonrisa. Porque esta semana se puede ganar un título y para, como mínimo, pelearlo en la final, las txuriurdines se han visto obligadas a enterrar las penas de inmediato y ponerse a trabajar en la semifinal de Supercopa que les enfrentará al Sporting de Huelva el miércoles (18.30) en Mérida.

Tampoco es que haya bastado con chasquear los dedos porque las dos últimas derrotas han dolido mucho. Y no sólo «por el resultado», lamenta Iris Arnáiz. «La actitud del equipo tampoco fue buena contra el Valencia», se enfada. «Obviamente, todas queremos ganar y dar lo mejor. Y siempre hemos demostrado que somos un equipo que por lo menos lucha hasta el final. Pero en Valencia creo que no fue así y es por lo que más disgustada estoy, más que por el resultado. Estamos entrenando muy bien y jugamos increíblemente bien a fútbol, también esta temporada, pero también hay que hacer autocrítica. Lo que nunca se puede negociar es el trabajo». Coincide Ane Etxezarreta en la necesidad de «autocrítica», sobre todo tras el partido de Valencia. «No creo que el miércoles mereciéramos perder pero la realidad es que lo hicimos. Nos cuesta marcar, nos marcan con poco, y además ayer tampoco jugamos nuestro mejor partido. Nos faltó intensidad. Además ellas estuvieron más acertadas, nosotras tuvimos ocasiones y no acertamos y ellas sí, pero además creo que el Valencia estuvo mejor y sobre todo lo intentó más y creo que ahí estuvo la clave, en que lo intentó más».

Cuando la inercia es positiva «parece que todo sale fácil y cuando pasa lo contrario es al revés –lamenta Alejandra Bernabé–. Y al final la cabeza es casi más importante que las piernas». «Incluso más –apunta Iris Arnáiz–. Lo hablaba el otro día con mi familia, que recordaba algunos partidos del año pasado, en los que jugamos mucho peor y ganamos y este año estamos jugando mejor la gran mayoría y se nos escapan más puntos. Y al final te agota mentalmente. Yo vengo de una situación con el Deportivo que fue muy difícil mentalmente pero creo que me ayudó a saber sacar los positivo por eso este año estoy intentando ayudar lo máximo posible a mis compañeras».

Etxezarreta reconoce que cuando las cosas no salen bien, la cabeza no ayuda a voltear la situación «pero no podemos tomarlo como una excusa porque al final la cabeza, la mentalización, hay que trabajarla. En el deporte de alto rendimiento, la cabeza supone un 99% y en eso tenemos que ser fuertes, no podemos pensar que las cosas nos caerán del cielo. Una cosa es querer pero ese querer hay que trabajarlo, no podemos rendirnos, no podemos. Tenemos un equipo muy bueno y tenemos que recordarlo y hacerlo valer», reivindica.

¿El mejor momento?

La Supercopa ofrece la oportunidad de resetear, ofreciendo una motivación difícimente igualable, la posibilidad de conquistar un título en una competición de dos partidos. El tópico dice, además, que no hay mejor recuperación para los digustos que un compromiso inmediato. Aunque la lógica invita a pensar que los retos se afrontan mejor con descanso y en buena racha. «Las dos posibilidades me valen –sonríe Etxezarreta–. Claro que prefieres llegar descansada pero es así y además el Sporting también ha jugado el fin de semana. La realidad es que el miércoles empieza una nueva competición, corta y exigente, y que está en nuestras manos la manera de afrontarlo. Tenemos que saber que somos un buen equipo y no rendirnos», insiste.

«Va a depender de nosotras que sea el mejor o el peor», coincide Bernabé. «Pero yo creo que el equipo va a estar a la altura porque lo vemos como la posibilidad de dar un golpe sobre la mesa. Que al final miras la clasificación y somos sextas. No estamos en el puesto que queríamos pero seguimos siendo uno de los mejores equipos de la Liga y eso nos tiene que llevar a dar un golpe encima de la mesa, a decir “aquí estamos y podemos ganar la Supercopa”».

Para ganarla hay que empezar por llegar a la final. Y para eso hay que superar el miércoles al Sporting de Huelva, un equipo dificilísimo de batir a un solo partido. «Antes hablábamos de las piernas y la cabeza, pues éste es un partido de ganar sobre todo con el corazón –asegura Bernabé–. De decir este partido lo tenemos que sacar por nosotras, por el equipo, por la afición y por la gente que confía en nosotras. Porque el Sporting juega así y se le gana así. Tenemos que intentar jugar bien y hacer nuestro fútbol, evidentemente, y ser contundentes en las dos áreas, que es lo que nos está faltando esta temporada, pero para llegar a todo eso, éste es un partido que tenemos que jugar con el corazón».

«Lo peor que se puede hacer con cualquier rival es menospreciarlo y más aún con el Sporting –advierte Etxezarreta–. Lleva muchos años en Primera, muchas veces sufriendo hasta la última jornada, pero sigue aquí. Es un equipo duro y muy luchador, que igual no hace el fútbol que más le puede gustar al público pero es que el fútbol es eso y son los resultados. Y ellas son buenas. No podemos olvidar eso y tampoco que nosotras también somos un buen equipo, que ahora no podemos dejarnos porque la temporada no esté saliendo como queríamos. Lo que tenemos que hacer es cortar la mala racha afrontando este partido con toda la ilusión y trabajándolo para seguir adelante y jugar la final el domingo».

El primer asalto se disputará el miércoles en el Estadio Romano José Fouto (18.30) y podrá verse por alguno de los canales de Televisión Española (Teledeporte o rtveplay), al igual que la semifinal que disputarán un día después Barcelona y Real Madrid. Los ganadores de los dos partidos pelearán por el título, también en el estadio emeritense, el próximo domingo (12.00).