EH Bildu ha registrado una moción para solicitar al Gobierno municipal la elaboración de un protocolo contra las agresiones, acoso y violencia machista y LGTBIfobica en espacios de ocio nocturno privados, con el objetivo de llevar a cabo actuaciones de prevención y garantizar la atención directa y prioritaria a las personas agredidas.

En la iniciativa, demandan que este protocolo sea elaborado en contraste y colaboración con todos los agentes implicados: la hostelería, movimiento feminista, movimiento LGTBI, consejo de las mujeres y representantes de los grupos municipales.

En rueda de prensa, las concejalas Jone Goirizelaia y Alba Fatuarte han explicado que los locales de ocio nocturno, discotecas, salas de concierto, bares o festivales son espacios de encuentro y relación en los que se pueden producir agresiones sexuales. Así, han expuesto que algunas ciudades como Barcelona e Iruñea cuentan ya con sus propios protocolos en este ámbito.

En el caso de Bilbo, a iniciativa de su grupo, según han recordado, el Pleno acordó en junio promover acciones de prevención de violencia machista en los entornos festivos de las fiestas de los barrios, en colaboración con las comisiones de fiestas, hostelería y movimiento feminista. «Un acuerdo, sin duda, importante», han apuntado.

«Un paso más»

Ahora EH Bildu solicita dar «un paso más», elaborando un protocolo contra agresiones machistas y homófobas en espacios de ocio nocturno privados y en festivales que acojan un gran número de personas, como el BBK Live, «contribuyendo a generar un modelo festivo y de ocio nocturno basado en el respeto a las libertades, individuales y colectivas».

Goirizelaia y Fatuarte han detallado que la adhesión a este protocolo como agentes colaboradores «sería voluntaria» y los locales adheridos se comprometerían «a formar a su personal en la prevención, detección y actuación ante situaciones de violencia contra las mujeres». «La formación sería impulsada y financiada por el Ayuntamiento, que, a su vez, ofrecería un manual con información básica sobre cómo actuar en caso de agresión sexista en sus instalaciones», han señalado.

Los locales adheridos, según las dicho, acreditarían que han revisado los puntos peligrosos que puedan tener sus los locales para adecuarlos; revisarían su oferta de ocio, tanto en la programación como en la difusión, para evitar que se lleven a cabo acciones que denigran a las mujeres, como por ejemplo cartelería sexista.

«Asimismo, adquirirán un papel que consiste en detectar situaciones potencialmente peligrosas o incómodas y en atender a las víctimas, cuando se ha producido una agresión, para garantizar que estos espacios tengan un rol activo contra la violencia machista», han añadido.

«Es necesario que todos y todas nos impliquemos en la lucha contra la violencia machista. La actuación conjunta y coordinada de los agentes de ocio nocturno de la ciudad contribuye a la transformación social, a revertir las desigualdades y a generar un contexto social y cultural a favor de la igualdad y el respeto», han concluido.