La huelga de médicos en Nafarroa, iniciada el 1 de febrero, se mantendrá en suspenso, pero solo hasta el 15 de marzo. Así lo han decidido las asambleas de facultativos convocadas este lunes. La huelga indefinida se reactivará en caso de que, para ese día, el Gobierno no haya cumplido con el pacto que firmó semana pasada. 

La decisión de reactivarse en marzo tiene mucho que ver con la debilidad que muestra el Gobierno. El acuerdo implica retocar de la ley 11/92, y el PSN no cuenta, a día de hoy, con los apoyos suficientes para sacar estos cambios adelante. 

Varios de los aspectos fundamentales del acuerdo alcanzado entre el Sindicato Médico de Navarra (SMN) y Salud requieren de tramitación parlamentaria. En particular, aquellos relativos al aumento salarial, como los 400 euros mensuales o el aumento de retribuciones por las tutorías MIR. Si no se cambia la ley para incluir el complemento de «productividad fija», los médicos no podrán cobrar los 400 euros. 

El Gobierno necesita articular una mayoría para acometer esos cambios. De ahí haya llamado a sus socios habituales a un encuentro explicativo para las 17.00 horas de este lunes. Ni siquiera los partidos que forman parte del gobierno de coalición han adelantado el voto favorable. 

Uxue Barkos, de Geroa Bai, ha eludido los puntos más espinosos, pero ha adelantado que tienen «muchas dudas» que les van a tener que aclarar y que en el papel «no quedan claras». Ha incidido en que no se puede obviar que es un acuerdo al que se ha llegado exclusivamente con el SMN y que ha dejado «malestar y sinsabores en la Mesa Sectorial y General».  

Por parte de Podemos, Mikel Buil ha sostenido que la forma de negociación ha sido «perversa y agraviante», si bien ha mostrado menos reticencias, a priori, que Barkos. Ha asegurado que el hecho de que la exclusividad haya quedado fuera hace más fácil que lo puedan apoyar. 

Bloqueo de EH Bildu

El problema es EH Bildu. Adolfo Araiz ha dejado muy claro que el acuerdo les preocupa y mucho. Les genera rechazo por dos motivos diferentes. De una parte, Araiz ha recordado el enorme enfado que generó el desplante de Artundo a la Mesa General, foro donde el director general de Salud leyó el papel con los puntos fundamentales del acuerdo alcanzado, pero sin llegar a entregar el documento (lo acabó haciendo público el Sindicato Médico en un mail masivo a los facultativos). 

Araiz ha avanzado que sin una verdadera negociación y un eventual aval de los cauces de negociación establecidos, EH Bildu no puede respaldar el acuerdo.

El segundo motivo alegado tiene incluso mayor peso. El portavoz de EH Bildu ha incidido en la segunda parte del acuerdo, donde se fija una mesa paralela de negociación Salud-SMN para volver a discutir aumentos salariales y reabrir la posibilidad de la eliminación del régimen de exclusividad. 

Si bien esta parte parecía menos relevante que los puntos más cerrados, Araiz ha hecho una revelación importante. El Gobierno no ha pedido a sus socios habituales que apoyen los cambios concretos para incluir nuevos complementos, sino que les ha solicitado una suerte de carta habilitante para modificar la ley de Salud a través de reglamentos (sin tener que pasar por el Parlamento).

Este punto es relevante porque el Parlamento se disuelve a principios de abril, mientras que ese foro de negociación paralelo (donde se volverá a discutir la exclusividad, se contemplan nuevos aumentos y levantar la prohibición de dos años para las excedencias en nuevas plazas) durará hasta el día 30. Esto daría carta blanca al Gobierno para hacer lo que quisiera durante dos semanas. 

Sin el apoyo de EH Bildu avalando el acuerdo, el PSN solo puede cumplir lo acordado con el SMN gracias al apoyo de Navarra Suma. Por de pronto, no la ha citado al encuentro de este mismo lunes a las 17.00 horas. 

Marta Álvarez, portavoz del gran partido de la oposición, no ha ocultado que ese acuerdo con el SMN les gusta, pero que eso no implica que vayan a sacar al Gobierno del problema en que se ha metido.«Que nadie de por hecho que vamos a aprobar esta propuesta», ha adelantado.

Álvarez ha recordado que el Gobierno se ha negado en todo momento a informarles del proceso y la negociación. Y que ahora les ha entregado un acuerdo que «o te lo comes o lo dejas». 

NA+ ha querido dejar su voto en el aire, buscando interlocución. «Tenemos que estudiarlo y veremos». Sobre la negociación de esta tarde, Álvarez ha aclarado «no iremos porque no nos han invitado».