Pello Guerra

Chivite acusa a la derecha de «insultar», y le exige que Nafarroa no sea «un juguete político»

La polémica sobre el cartel del PP de Nafarroa en el que tacha de «traidores» a María Chivite y Pedro Sánchez ha llegado al Parlamento, donde la lehendakari navarra ha acusado a la derecha de «insultar y embarrar» la política, y le ha pedido que el herrialde no sea «un juguete político de nadie».

El PSN ha llevado al Parlamento el polémico cartel del PP de Nafarroa.
El PSN ha llevado al Parlamento el polémico cartel del PP de Nafarroa. (NAIZ)

«Insultar, mentir y embarrar» la política es la acusación que ha hecho la lehendakari Chivite a la derecha navarra, a la que ha pedido que el herrialde no sea «un juguete político de nadie».

De esta manera, ha respondido en el pleno de la Cámara a una pregunta parlamentaria formulada por el propio PSN a través de su portavoz, Ramón Alzórriz, en la que le cuestionaba sobre el uso político del herrialde por parte de la derecha, tanto navarra como estatal.

La pregunta era la excusa para sacar a colación el polémico cartel de enormes dimensiones que el PP de Nafarroa ha colocado en el exterior de la Estación de Autobuses de Iruñea. En el mismo, aparecen en blanco y negro con el lema «Traidores» fotografías de Pedro Sánchez, María Chivite, Arnaldo Otegi y Joseba Asiron, en contraste con una imagen en color y el eslogan «o ¡Navarra!», con un sonriente Javier García, presidente del PP, en el paseo Sarasate.

Alzórriz se ha mostrado especialmente molesto con la derecha navarra, a la que ha acusado de recurrir «a la política sin escrúpulos. Nos acostumbran a escuchar y ver mensajes repugnantes», al tiempo que les ha criticado por ser «asiduos a las pancartas y el enfrentamiento, y a los discursos incendiarios».

Ha considerado que «asociar la palabra traidores a las políticas del PSOE es ruin e intolerable, y nos hiere. No solo son ruines en las formas, sino también en los modos». Y ha espetado a la derecha que «en política no todo vale» y que «las palabras gruesas y los insultos no benefician a nadie».

El portavoz del PSN ha achacado esa campaña agresiva a «la falta de propuestas y de programa» de la derecha. Un argumento que ha sido empleado también por Chivite en su respuesta, en la que ha acusado a las formaciones conservadoras de «insultar, mentir y embarrar» la política, «siempre buscando generar la desafección que debilite la democracia» y lo que «dice mucho de lo poco que le importa la convivencia en esta comunidad».

«Así entienden la política por falta de propuestas», ha añadido, mientras ha recordado que «en la derecha sabemos que incluso espían a los que no piensan como ellos», en referencia al espionaje a Mari Jose Beaumont cuando era consejera del Gobierno de Nafarroa.

La lehendakari ha exigido «basta ya de utilizar a Navarra para atacar al Gobierno. Esta comunidad no tiene que ser el juguete político de nadie» y ha abogado porque «hagamos de la política un servicio púbico útil».

Una estrategia también contra UPN

Con estos comentarios, el PSN ha puesto en evidencia el malestar que le ha generado la agresiva campaña del PP de Nafarroa, que se ha echado al monte a la hora de llamar la atención del electorado de cara a los comicios del 28 de mayo. De hecho, hasta ha realizado descalificaciones de calibre grueso contra UPN, su antiguo socio de coalición en Navarra Suma.

Así, las visitas a Nafarroa de altos cargos del PP se han convertido en ocasión para ahondar en la brecha abierta con la formación de Javier Esparza. La veda la abrió el vicepresidente de Organización del PP, Miguel Tellado, quien aseguró el pasado febrero durante una visita a Iruñea que Esparza había transformado a UPN «en un auténtico plan de pensiones» con el que aspira a ser vicepresidente de un Gobierno liderado por Chivite.

Ahondó en esta idea señalando que Esparza «ha decidido abandonar» el centro-derecha «para situarse en el otro lado de la barrera y convertirse en muletilla del Partido Socialista». Y añadió que «hoy por hoy solo piensa lamentablemente en Esparza y está traicionando el compromiso histórico de una formación política que fue referente del centro-derecha, y digo fue porque ya no lo es».

Incluso pidió a UPN que «no apele al votante del centro-derecha para después pactar con el Partido Socialista y después, sostener gobiernos que se apoyan en Bildu».

A este último argumento, el coordinador general del PP, Elías Bendodo, le dio una vuelta de tuerca para afirmar también en Iruñea mismo que «UPN está en los brazos no solo del PSOE, sino también de Bildu». Hasta añadió que «cuánta gente ha votado a UPN pensando que era un partido que representa el centro-derecha. Ahora está en los brazos no solo del partido socialista, sino de Bildu».

Sobre el final de la coalición Navarra Suma, señaló que «las explicaciones no las tiene que dar el PP, las tiene que dar UPN. Tradicionalmente nos hemos entendido. De forma unilateral, UPN ha decidido romper el acuerdo y echarse en brazos del Partido Socialista. Todos los partidos y todo el mundo está huyendo de un activo tóxico que es el PSOE y el único partido que se echa en los brazos del PSOE es UPN, esto tendrán que explicarlo», dijo Bendodo.

Estas declaraciones del PP generaron un profundo malestar en UPN y sobre todo en Javier Esparza, quien replicó a Bendodo señalando que lo que había afirmado «es algo que nadie se cree, es una ignominia y una estupidez». Es más, le pidió que esté mejor informado y si no lo hace, «no dedicarse a la política».

Y del coordinador general del PP, pasó en sus críticas al partido en sí para señalar que esas declaraciones «suponen desconocer esta tierra y dejan a las claras cuál es el nivel del PP en Navarra y a nivel nacional», para añadir que «ellos sabrán a donde van con estas declaraciones, pero se retratan solos y quedan absolutamente en evidencia».

«En la política española, y eso lo está trasladando el PP a Navarra, vale todo y se puede decir cualquier estupidez para salir en una portada, en un medio de comunicación», lamentó, aseverando que «no tienen ni complejo ni pudor».