Rusia acusa a Washington de estar detrás del ataque con drones al Kremlin y de otros atentados y sabotajes ucranianos en territorio ruso.
«Sabemos que las decisiones sobre los atentados no se toman en Kiev, sino en Washington», ha afirmado el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov.
EEUU «decide los objetivos y los medios, y Kiev ejecuta», ha insistido en su comparecencia diaria, para añadir que «no siempre se le da permiso a Kiev a elegir los medios».
El secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, ha puesto en duda la versión de los hechos de Moscú, afirmando que, «como todo lo que sale del Kremlin», es «necesario tomárselo con cautela».
El portavoz del Kremlin ha advertido de que la respuesta rusa será «equilibrada y correspondiente a los intereses» del país.
China ha pedido «a todas las partes» que eviten «tomar medidas que puedan empeorar aún más la situación».
El Gobierno ucraniano, como hiciera ayer el presidente, Volodimir Zelenski, insiste en negar responsabilidad alguna en el envío de los dos drones que explotaron sobre la cúpula del Palacio del Senado, en el complejo del Kremlin.
«Impulso sin precedentes»
Por contra, el Ministerio de Exteriores ruso ha inscrito este suceso en el contexto de unas «actividades terroristas y de sabotaje de las Fuerzas Armadas de Ucrania (que) están ganando un impulso sin precedentes (...). Atacaron el puente de Crimea el 8 de octubre de 2022, ha habido ataques contra objetivos no militares en las regiones de Briansk, Belgorod y Rostov, múltiples sabotajes y ahora Moscú...».
La ministra francesa de Exteriores, Catherine Colonna, ha tildado el suceso de «extraño», «misterioso» y «bastante poco comprensible en una situación normal», destacando el desmentido ucraniano.
El alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, el español Josep Borrell, ha ido más allá y ha hecho suyo el desmentido de Zelenski, para a continuación instar a Rusia a que «no utilice este supuesto ataque como excusa para continuar la escalada de la guerra».
El Ejército ruso ha atacado de nuevo esta madrugada la ciudad de Kiev y sus alrededores con drones de tipo «shahed», de fabricación iraní, y que pudieron ser derribados, según el jefe de la Administración Militar de la capital, Serhiy Popko. «¡Ya es el tercer ataque contra la capital en los primeros cuatro días de mayo!», denunció.
Horas después, Moascú ha denunciado que un dron ha causado un incendio en una refinería de petróleo de Ilsky, en la región de Krasnodar, sur de Rusia.