Osasuna ha evaluado en 3 millones de euros las pérdidas que ha acumulado a 31 de diciembre de 2022, fecha en la que se cerró la Auditoría de Estados Intermedios, que puede ser descargada en la web del club.
En concreto, el resultado negativo es de 3.023.164,71 euros, al que se ha llegado «fundamentalmente por el incremento de costes de plantilla deportiva, posibilitado por la aplicación del acuerdo con CVC», se esgrime en la dicha auditoría.
La entidad rojilla admite que «se empeoran los resultados previstos debido principalmente a la utilización de fondos del Plan Impulso para la confección de la plantilla deportiva».
Por otro lado, Osasuna matiza que a fecha de último día del año 2022 no se recoge el impacto económico que ha supuesto llegar hasta la final copera, «así como los ingresos por nuevos patrocinios firmados a posteriori o el ahorro en plantilla deportiva».
Del mismo modo, tampoco se ha computado la venta de algunos bienes embargados, como un inmueble del ex presidente Pachi Izco valorado en 580.000 euros, un ingreso que «no mejorará las cuentas, pero sí la tesorería de la entidad».
Lo mismo cabe decir del pago que deberá realizar el Torino de 1,5 millones por el traspaso de Álex Berenguer al Athletic, se argumenta desde el club navarro.
Osasuna también apunta que se ha producido un «notable» incremento en los ingresos publicitarios. A 31 de diciembre de 2022 se evaluaban en 4,2 millones, con lo que se espera desde la entidad rojilla que puedan alcanzar los 8 millones, «frente a los 6,5» de la campaña pasada.
Plan Impulso
En el comunicado se explica también que Osasuna ya ha cobrado 26 millones de los 52 que le corresponden dentro del Plan Impulso, préstamo derivado del acuerdo que alcanzó LaLiga con el fondo CVC.
«Lógicamente estos fondos incrementan la deuda al tratarse de un préstamo. Por ese motivo, la deuda neta de la entidad es de 60 millones de euros frente a los 51 millones de junio de 2022», se explica en la nota.
«Es algo que ocurrirá también durante los dos próximos años cuando el club cobre 13 millones en junio de 2023 y otros 13 millones en junio de 2024», se avisa desde el club navarro.
Por contra, se ha anunciado que la deuda bancaria «se ha reducido en un 17%», pasando de 24 a 20 millones, con una previsión de que se vaya a reducir en un 50% durante el presente año.
De este modo, casi toda la deuda de la entidad rojilla se concentrará «en un único préstamo a 40 años con LaLiga, con una amortización muy baja, que es el objetivo marcado por la Junta Directiva del club».
En lo que se refiere a las inversiones, la principal se centra en la compra de 166.000 metros cuadrados de terreno en Tajonar, con un importe de 6,5 millones más IVA, lo que supone «el inicio de la recuperación patrimonial del club».
Asimismo, la inversión supone la devolución al Gobierno de Nafarroa de una parte considerable de la dación en pago efectuada en 2014 para hacer frente a las deudas del club, depositando 6,5 millones para recuperar una parte del patrimonio.