Koldo Landaluze
Especialista en cine y series de televisión

20 años sin Gregory Peck, la distancia genial entre Atticus Finch y el capitán Ahab

Hace 20 años, el 12 de junio de 2003, fallecía Gregory Peck, uno de los actores más carismáticos y populares del Hollywood clásico. Protagonista de títulos tan inolvidables como ‘Matar a un ruiseñor’ o ‘Moby Dick’, entre otras, fue el primero en ser galardonado con el premio Donostia en 1986.

Eldred Gregory Peck nació el 5 de abril de 1916 en La Jolla, California. Sus padres se divorciaron cuando él solo tenía cinco años y el pequeño se crio al lado de su abuela, la cual le llevaba al cine todas las semanas. Gracias a este hábito nació su vocación de actor.

Durante varios años abandonó California para trasladarse a la Costa Este, a Nueva York. Allí se matriculó en la escuela de Martha Graham, una pionera de la danza moderna.

Según recordó Peck «estudié con ella no para aprender a bailar sino para saber moverme en el escenario. Pasé tres horas a la semana en su clase durante dos años. Su mirada era directa y penetrante, pero muy cálida».

En 1942 debutó en los escenarios de Broadway y un año después se colocó ante una cámara en Hollywood para rodar su primera película, ‘Días de gloria’, dirigida por Jacques Tourneur, un film que narra la resistencia soviética frente a la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial.

Película a película, desarrolló su técnica actoral, su voz profunda, su sonrisa triste y su actitud elegante. Una carrera que le llevó a trabajar a las órdenes de los mejores directores de Hollywood, como Alfred Hitchcock, con el que no se llevó precisamente bien durante los rodajes de ‘Recuerda’ y ‘El proceso Paradine’.

La constante personificación de la ética

También rodó con autores como William Wyler, Raoul Walsh o Robert Mulligan, que le dirigió en la mítica adaptación de ‘Matar a un ruiseñor’, en la que el actor legó para la posteridad el que siempre consideró su personaje favorito, el abogado Atticus Finch, papel por el que ganó su único Óscar.

Con Vincente Minnelli filmó ‘Mi desconfiada esposa’, con King Vidor ‘El vengador sin piedad’, con Elia Kazan ‘La barrera invisible’ y con Henry King ‘El pistolero’.

Siempre fue asociado a personajes que encarnaban virtudes sencillas y nobles, seres que tenían profundas convicciones éticas y morales.

Un crítico de cine escribió en una ocasión que el público se identificaba inmediatamente con los personajes que interpretaba porque llevaba dentro lo mejor de todos nosotros.

No obstante, también lo recordaremos sobre la cubierta del ‘Pequod’ y dando vida al obsesionado Ahab, encarnando al criminal nazi Josef Mengele en ‘Los niños del Brasil’ o portando el revólver de Lewt McCanles en la inolvidable ‘Duelo al sol’.

Al contrario que Jack Lemmon, Peck sí cenó en Donostia y se convirtió en el primer Premio Donostia de Zinemaldia, un galardón creado por Diego Galán en su estreno como director del certamen en 1986.

Con motivo del 20º aniversario de su fallecimiento, TCM ha preparado un ciclo que incluye algunas de sus obras más recordadas, entre ellas, ‘El mundo en sus manos’ (1950), ‘Matar a un ruiseñor’ (1962), ‘El pistolero’ (1950), ‘El cabo del terror’ (1962), ‘El proceso Paradine’ (1944) y ‘Las nieves del Kilimanjaro’(1952).

A estos títulos también se sumará el estreno en exclusiva del documental ‘Gregory Peck, el gran actor’ (2022), que dirigido por Grégory Maitre, repasa la trayectoria de este mítico actor.