Iñaki  Iriondo
Cronista político

El vertedero de Zaldibar presenta «riesgos severos» que van a peor

El vertedero de Zaldibar presenta «riesgos ambientales severos tanto por peligrosidad como por vulnerabilidad», una situación que está empeorando. Por eso es precisa la «ejecución inmediata de una cubierta artificial temporal» y es urgente su «sellado definitivo», según informes técnicos y de Lakua.

Escenificación preparada para una comparecencia gubernamental en el primer aniversario del derrumbe.
Escenificación preparada para una comparecencia gubernamental en el primer aniversario del derrumbe. (Jaizki FONTANEDA | FOKU)

El 6 de febrero de 2020 se derrumbó el vertedero de Zaldibar matando a Alberto Sololuze y Joaquín Beltrán. Las obras de urgencia acometidas por el Gobierno de Lakua para estabilizar el terreno finalizaron el 31 de agosto de 2021. En aquel momento, el coeficiente de seguridad de la zona era superior o igual a 1,6 en condiciones secas y de 1,4 en condiciones de fallos de drenaje.

Pero según un informe encargado por el Departamento de Arantxa Tapia a la empresa Geología y Geotecnia Larrea, SL, y recogido en la documentación remitida este 1 de junio al Juzgado de Instrucción número 1 Penal de Durango, «en fechas recientes no se ha realizado un mantenimiento mínimo que garantice que no se supere el área máxima expuesta a la filtración de agua de la lluvia al no haber colocado ninguna barrera artificial».

Por ello, tan solo entre ese 31 de agosto de 2021 y el 21 de enero de 2022, última fecha de la que se tienen datos, se han observado movimientos intersemanales superiores a los 10 mm, con velocidades por encima de los 0,2 mm/día. Los mayores movimientos se observan en la zona inferior del vertedero y han aparecido grietas.

Esto hace que, según la documentación remitida al Juzgado, el Factor de Seguridad (FS) actual es 1,15, que se califica como «muy bajo». Es decir, la situación se está agravando de forma preocupante.

Lixiviados e incendios

El vertedero de Verter Recycling, SL, está cubierto por una capa de 30 centímetros de espesor medio en toda su superficie. Pero se trata de un «material arcilloso, cuya eficacia tiene un alcance limitado en el tiempo y actualmente permite la infiltración de agua de la lluvia». Esto da lugar a olores, lixiviados y a riesgo de incendios.

El informe detalla que la «elevada humedad en el vertedero puede intensificar la disolución del dióxido de carbono y, en consecuencia, aumentar el contenido de metano», «un gas inodoro e inflamable a temperatura y presión atmosférica normales».

A esto se añade que «la presencia de oxígeno en el material del propio vertedero y, además, el oxígeno que puede penetrar desde la atmósfera contribuyen a la generación de incendios».

Asimismo, el paso del agua va dando lugar a lixiviados, que son sustancias líquidas que circulan entre los residuos del vertedero.

Llama la atención que entre las recomendaciones asumidas por el propio Gobierno de Lakua se encuentre una tan básica como «cumplir con la legislación vigente»

Del análisis de todos estos datos, la firma Larrea SL señala y el Gobierno de Lakua hace suyo que, «el vertedero de Verter Recycling 2002 SL de Zaldibar presenta, en su situación actual, riesgos ambientales severos tanto por peligrosidad como por vulnerabilidad».

Estas situaciones de riesgo «se producen sobre el propio residuo: en el asentamiento, inestabilidad, incendios y generación de lixiviados; y sobre el medio atmosférico; olores y emisión de gases nocivos».

Actuaciones «urgentes»

Ante esta situación de riesgo severo, se propone la «ejecución inmediata de una cubierta artificial temporal como solución urgente hasta la ejecución del sellado definitivo». Una cubierta inicial que por ahora «permita mantener las condiciones de impermeabilización de la normativa aplicables en todas las fases de la vida del vertedero y mantener correctamente su integridad».

El propio Ejecutivo lo considera «una medida cuya adopción es urgente para evitar daños medioambientales».

Pero esto es solo un paso hasta acometer «el sellado definitivo del vertedero», que los autores del informe recomiendan que «debe realizarse de forma urgente».

Entre las recomendaciones figura también «realizar un estudio de estabilidad global del residuo», tanto en este momento como después del sellado. Además, habrá que «realizar los controles de los seguimientos habituales y actualizados al vertedero, con balances hidráulicos, control de lixiviados, control de movimientos, etc.».

Llama la atención que entre las recomendaciones asumidas por el propio Gobierno de Lakua se encuentre una tan básica como «cumplir con la legislación vigente».

Y, por supuesto, olvidarse de construir en esos terrenos un polígono industrial.