Acto político del PNV en Sestao marcado por el debate entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo, que el presidente del EBB ha calificado de «gran fraude». «Ni uno ni otro mencionaron la palabra Euskadi» y cuando lo hicieron, fue «para atacarse». «Nos usaron como armas», se ha quejado Andoni Ortuzar.

«Nos quieren muditos y modositos hasta el día 24 de julio. Entonces, con la calculadora en la mano, Sánchez o Feijóo, Feijóo o Sánchez, o los dos, nos empezarán a cortejar a unos o a otros para conseguir nuestros votos», ha avanzado.

Ortuzar les ha advertido de que su voto «va a estar muy caro» y que cualquier conversación pivotará sobre la base de «tres principios irrenunciables: el respeto más absoluto al autogobierno vasco; el respeto más absoluto a los principios democráticos y a los derechos de las personas; y el respeto más absoluto a las demandas mayoritarias de la ciudadanía vasca». «Sin esos tres elementos, no habrá nada de qué hablar con el PNV», ha subrayado.

En definitiva, con Vox no tienen nada que hablar, «y con quien se apoye en Vox, tampoco». «Ni por acción ni por omisión vamos a blanquear a la ultraderecha española. Ni por acción ni por omisión nuestra la ultraderecha española va a tener un milímetro de espacio. ¡Vox y nosotros somos antónimos!», ha remarcado.

Apuesta por la industria

En esta localidad de Ezkerraldea, como es habitual, el PNV ha reivindicado su apuesta por la industria «frente a un PSOE que decía que 'la mejor industrial es la que no existe'», en referencia al ministro Carlos Solchaga.

«Fue la desidia de los socialistas la que puso la puntilla a nuestra industria. No se nos debe olvidar aquello», ha incidido Ortuzar. Por ello, ha defendido que «la mejor política industrial es la que existe» y «llevan décadas liderando» las instituciones vascas, de forma que «con el tema de los fondos europeos ha sido puesta como ejemplo no solo en Madrid, sino también en Bruselas».

«Una política industrial por la que nos ha tocado bregar y defender con uñas y dientes ante el actual Gobierno y en la negociación de las medidas que han sido llevadas al Congreso de los Diputados. Si el PNV no hubiera estado presente en Madrid esta legislatura, miles de empresas vascas habrían cerrado por los efectos de políticas erróneas que este Gobierno quería poner en vigor», ha sostenido.

Frente al «cerrojazo que querían dar a todo durante la pandemia, o de la desidia y falta de acción que tuvieron cuando la energía se puso por las nubes y hacía imposible trabajar a nuestra siderurgia», ha señalado que fue el PNV el que «les obligó a cambiar el paso». «Luego, en privado –ha añadido Ortuzar–, nos han reconocido que menos mal que estuvimos allí presionando porque, si no, no ya en Euskadi sino en todo el Estado las consecuencias habrían sido letales para la economía».

«Una política seria»

Aitor Esteban, portavoz del grupo en el Congreso, ha reivindicado la forma de hacer política del partido, «una política seria, basada en el diálogo y el acuerdo». Así, ha criticado a quienes la «utilizan como un ariete para derribar al adversario» y se ha mostrado «harto de las exageraciones, de las fake news, del regate corto y de las palabras que se lleva el viento».

En este sentido, Esteban se ha comprometido a «actuar con responsabilidad» a lo largo de la próxima legislatura, como ya hicieran la legislatura pasada, votando a favor de la investidura de Sánchez con el objetivo de aportar «estabilidad».

«Ahora también, actuaremos con responsabilidad. Pero el PNV no es la muleta de nadie. Se debe solo a Euskadi, a su programa y a su ciudadanía. Y si alguien quiere nuestros votos, tendrá que dar respuesta a nuestros planteamientos, pactar y dar garantías. Estamos para que los intereses de la ciudadanía vasca se tengan en cuenta, no para ser los monaguillos de nadie», ha asegurado el candidato jeltzale por Bizkaia.