La eurodiputada de JxCat Clara Ponsatí ha reaparecido este lunes en Barcelona después de que el pasado 21 de junio el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena emitiera una orden de detención contra ella por no comparecer ante él el pasado 24 de abril, cuando la citó para comunicarle su procesamiento por un delito de desobediencia en el «procés».

Tras ello, ha sido detenida por los Mossos d’Esquadra y trasladada este lunes a mediodía a la Ciutat de la Justícia de Barcelona para tomarle declaración. Ya ocurrió algo similar en marzo, cuando volvió del exilio por vez primera tras cinco años.

Fuentes de la Conselleria de Interior han informado a Europa Press de que la han detenido los Mossos d'Esquadra y que han actuado como policía judicial a órdenes del juez.

La propia Ponsatí había anunciado poco antes que había «vuelto a ser detenida ilegalmente en Barcelona», en un tuit de este lunes de las 11.48 horas.

Un par de horas antes, en un mensaje en su cuenta de Twitter, Ponsatí ha colgado una foto que la situaba junto a la modernista Casa Vicens, proyectada por Antoni Gaudí, en el barrio de Gràcia de Barcelona.

«Aprovechando el fresquito de la mañana, he dado un paseo hasta la Casa Vicenç. Mientras estemos aquí, Cataluña continuará de pie. ¡Buenos días, Barcelona!», ha escrito la también exconsellera, represaliada por su participación en el Govern en el referéndum del 1 de octubre de 2017.

Aprofitant la fresca del mati he fet un vol fins a la Casa Vicenç. Mentre siguem aquí, Catalunya continuarà dempeus.
Bon dia, Barcelona! pic.twitter.com/XzKHgQguF4

— Clara Ponsatí (@ClaraPonsati) July 24, 2023

La exconsellera y eurodiputada de Junts Clara Ponsatí ha salido en libertad a las 14.49 horas de la Ciudad de la Justicia de Barcelona tras rechazar declarar ante el juez de guardia en Barcelona.

Ponsatí ha sido recibida por unas quince personas en los que se encontraban Aleix Sarri (Junts), el diputado de la CUP en el Parlament Carles Riera y la presidenta de la ANC, Dolors Feliu.

Orden de detención dictada por Llarena

El pasado 24 de abril Ponsatí no acudió a la citación de Llarena alegando que esa misma jornada tenía dos compromisos en Bruselas que resultaban «incompatibles» con su citación en Madrid.

Tras su incomparecencia, el magistrado instructor de la causa por el proceso independentista catalán de 2017 consultó a la Fiscalía y a la Abogacía del Estado, que se inclinaron por volver a citar a Ponsatí, si bien Llarena finalmente optó por emitir una orden estatal de detención contra ella con el objetivo de que se ponga a disposición del tribunal y se le comunique su procesamiento.

El juez afirmó en su auto que Ponsatí había «desatendido voluntaria e injustificadamente la citación judicial», aunque precisaba que la orden podía quedar sin efecto si comparecía voluntariamente ante él.

Respecto a las obligaciones parlamentarias que adujo para no comparecer, Llarena subrayaba que Ponsatí estaba citada ante el Supremo la mañana del 24 de abril, mientras que los compromisos políticos que alegó estaban programados para la tarde, razonablemente compatibles mediante la petición de videoconferencia.