La carrera masculina en ruta del Mundial de Ciclismo que se celebró el domingo en Glasgow fue interrumpida por una protesta en la que un grupo de personas pegó sus manos a la carretera en una denuncia medioambiental. La competición estuvo suspendida durante varios minutos y la imagen de los ciclistas parados en la carretera fue difundida por la organización y dio la vuelta al mundo. Los activistas fueron detenidos por la Policía escocesa.
En cambio, apenas se ha difundido la motivación del grupo que llevó a cabo la acción, que recuerda a las que se llevaron a cabo en Euskal Herria por el grupo Solidarios con Itoitz contra la construcción del embalse que fue declarado ilegal por la Audiencia Nacional española.
El grupo que protagonizó la protesta en los accesos a Glasgow se llama This Is Rigged, que puede traducirse por «Esto esta amañado» y que reclama que su suspendan las prospecciones de petróleo y gas en Escocia.
Precisamente, la semana pasada, el primer ministro británico, Rishi Sunak, anunciaba que iba a dar luz verde a cientos de nuevas licencias para yacimientos de gas y petróleo en Inglaterra y Escocia. La cuestión, por tanto, está de plena actualidad en los dos países británicos.
Larga trayectoria de protestas
En su página web incluyen un vídeo en el que explican cómo llevar a cabo acciones de protesta como la que hicieron el domingo en Escocia.
En la misma web explican que sus demandas son que el Gobierno escocés se oponga a «todos los nuevos proyectos de combustibles fósiles» en ese país y que, además, cree un fondo para financiar la transición de los trabajadores de la industria del petróleo y del gas escocesa a nuevas actividades.
La del domingo no fue la primera acción llamativa que This Is Rigged llevó a cabo. En marzo, por ejemplo, rompieron con una piedra el cristal que protege la espada de William Wallace, el luchador por las libertades escocesas. De este modo, repitieron la acción que hace 111 años protagonizaron las sufragistas para reclamar el voto femenino.
El 26 de abril lanzaron pintura roja al Parlamento escocés para denunciar los intentos para prohibir sus acciones de protestas. En la declaración que repartieron ese día ya anunciaban que seguirían con sus acciones de protesta hasta que se atiendan sus demandas, lo que cumplieron el domingo.